España actúa como puerto de tránsito de material militar a Israel a pesar de la suspensión anunciada por el Gobierno

El 16 de mayo de 2024 el Gobierno de España anunció que prohibiría atracar en sus puertos a los buques cargados con material militar con destino a Israel. Sin embargo, una investigación de Progressive International (Internacional Progresista) y Palestinian Youth Movement a la que ha tenido acceso elDiario.es desvela que hubo al menos 25 trayectos desde EEUU con carga militar entre mayo y septiembre de este año que hicieron escala en el puerto de Algeciras antes de proseguir hacia su destinatario final: el Ministerio de Defensa de Israel (IMOD).

Los investigadores han detectado 1.185 envíos con suministros militares de más de 13.000 toneladas métricas que siguieron esa ruta. Este diario ha podido verificar esa información a través de bases de datos comerciales. Entre esas remesas hay placas blindadas (203 envíos), vehículos blindados (57 envíos), motores, piezas de vehículos y de aeronaves, neumáticos para aviones, cuerpos de proyectiles, equipo militar diverso, otros artículos varios y carga no identificada (431 envíos).

Ante preguntas de este medio, una fuente oficial del Ministerio de Exteriores explica que están “analizando las informaciones” con los “ministerios competentes” para “esclarecer lo sucedido”. La misma fuente añade que en caso de confirmarse lo que desvela este lunes elDiario.es, “se adoptarán todas las medidas necesarias” para garantizar “que se deje de utilizar” un puerto español como escala para mandar material militar a Israel.

En mayo de este año, ante varias alertas sobre barcos sospechosos de llevar armas a territorio israelí, el ministro de Exteriores, José María Albares, afirmó que el Ejecutivo “no permitiría” que los barcos con material militar destino a Israel hicieran escala en España. “A partir de ahí, yo creo que cualquier polémica es estéril y superflua”, concluyó.

1.185 envíos a Israel con material militar de 13.000 toneladas métricas hicieron escala en Algeciras entre mayo y septiembre

La relatora de Naciones Unidas, Francesca Albanese, y organizaciones como Human Rights Watch solicitaron a España que inspeccionara aquellos buques para asegurarse de que no transportaban material militar. Finalmente, se desvió la ruta de uno de esos dos barcos para evitar que atracara en territorio español. “Es la primera vez que lo hacemos, porque es la primera vez que detectamos un barco que lleva un cargamento de armas a Israel y que quiere hacer escala en un puerto español”, indicó entonces el ministro Albares.

A pesar de aquel anuncio del Gobierno español, esta nueva investigación indica que “rara vez se ha perdido un viaje semanal” entre mayo y septiembre de 2024 en esta línea de envío desde EEUU al Ministerio de Defensa israelí, con tránsito por Algeciras, a través de la empresa de transporte y logística Maersk.

“Exteriores ha rechazado y seguirá rechazando todas las solicitudes de escala en puertos españoles de buques con material militar y destino final a Israel”, insisten desde el Ministerio.

La Ley española 53/2007 establece pleno compromiso con el Tratado Internacional sobre Comercio de Armas, que prohíbe las transferencias —lo que incluye el tránsito— de material militar a destinatarios que puedan usarlo para cometer crímenes de guerra como ataques a civiles, crímenes de de lesa humanidad o genocidio, lo que sitúa a Israel en un destino no compatible con dicho Tratado. La propia transferencia de población del Estado ocupante –Israel– al territorio palestino ocupado constituye un crimen de guerra, según numerosos juristas expertos derecho internacional.

Además, la resolución de la Asamblea de la ONU aprobada en septiembre –con 124 votos a favor, incluido el de España– ordena la suspensión de las inversiones, el comercio y las transferencias -lo que incluye el tránsito- que puedan contribuir a la ocupación ilegal israelí o usarse como material militar en los territorios palestinos.

“Rara vez se ha perdido un viaje semanal” entre mayo y septiembre en esta línea de envío por Algeciras

Todos los envíos desde EEUU que pasaron por Algeciras entre mayo y septiembre fueron registrados en nombre del Ministerio de Defensa israelí. La dirección comercial indicada para cada entrada de datos corresponde a la de Interglobal Forwarding Services (IFS), una empresa consignadora y transportadora estadounidense registrada en Jersey.

IFS opera para el Ministerio de Defensa de Israel junto con la compañía G&B Packing Company, Inc., según señalan los investigadores de la Internacional Progresista. G&B Packing Company también está registrada en Jersey City, Nueva Jersey, y se encarga de recibir y procesar licencias de exportación aprobadas en Estados Unidos en nombre de Israel.

En su página web, Interglobal Forwarding Services (IFS) dice ofrecer “una gama completa de servicios de transporte de carga de todo el mundo”. La empresa asegura estar especializada en “Ventas Militares Extranjeras (FMS) y contratos de defensa” y en “requisitos de cumplimiento comercial (Licencias de exportación e importación)”.

El próximo 9 de noviembre está previsto que atraque en Algeciras el buque Maersk Denver, procedente de EEUU

IFS ha sido citada en múltiples ocasiones en asuntos relacionados con el comercio de armas a Israel. En particular, el informe titulado Fatal Freight (2017), del International Peace Information Service (IPIS), detalla cómo esta compañía sirvió durante la ofensiva israelí de 2014 contra Gaza (“Operación Muro Protector”) para ocultar información sobre las empresas que enviaban equipamiento militar a Israel. De ese modo, los documentos sobre los envíos, y las facturas de carga —lo que se conoce como conocimientos de embarque— no incluían el nombre de esas compañías suministradoras de material militar para Tel Aviv.

La investigación señala que IFS ha facilitado durante al menos una década envíos militares desde fabricantes de armas de EEUU al Ministerio de Defensa israelí y sirvió “para ocultar las identidades de estos fabricantes de armas”.

También apunta que, “considerando la acción del Gobierno español en mayo para bloquear los envíos militares a Israel”, es “muy posible” que el Ministerio de Defensa israelí “esté ocultando intencionalmente la verdadera naturaleza de este cargamento” para “burlar las restricciones a los envíos de armas”.

Más barcos en camino

El próximo 9 de noviembre está previsto que atraque en el puerto de Algeciras el buque Maersk Denver, procedente del puerto Newark-Elizabeth. Otro barco, el Maersk Seletar, llegará a Algeciras el 15 de noviembre. Con datos “disponibles para la autoridad portuaria, se puede determinar si cualquiera de esos dos buques contiene carga de Interglobal Forwarding Services enviada en nombre del Ministerio de Defensa israelí”, indica uno de los investigadores.

Envíos y adjudicaciones en 2023-2024

En febrero de este año elDiario.es desveló que, a pesar de la suspensión anunciada, España sí había realizado envíos de armamento a Israel en octubre, noviembre y diciembre de 2023. En el caso de diciembre, ese cargamento tenía como destino final Filipinas, tras su paso por territorio israelí. España también envió material militar en enero y febrero de 2024, para ser reexportado a Filipinas.

En julio elDiario.es informó de una nueva investigación del Centre Dèlas de Estudios por la Paz en la que se mostraba que, desde el 7 de octubre de 2023, España destinó 1.027 millones de euros para adquirir material militar israelí de empresas que se lucran con las masacres en Gaza y la ocupación ilegal.

Varios colectivos, integrados en la campaña Fin al Comercio de Armas con Israel, demandan desde hace tiempo un embargo formal y la revocación de todos los contratos vigentes de material militar cuyo destino u origen sea el Estado de Israel. A ello se suma una carta reciente, firmada por 300 personalidades del mundo de la cultura, en la que se pide al presidente Pedro Sánchez un embargo integral de armas a Israel, incluido “el tránsito de armas y combustible militar por nuestro territorio”.

El pasado 22 de octubre la ministra de Defensa, Margarita Robles, en contestación a una carta del ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, afirmó por primera vez que todas las adjudicaciones a empresas de armamento israelíes están paralizadas, pero no despejó dudas sobre los contratos de compra de material militar israelí que seguían su curso hasta hace pocas semanas. Tres días antes la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, había anunciado que su partido no apoyará al Gobierno -en plena negociación de los Presupuestos- si éste no rompe relaciones con Israel.

El Tratado sobre Comercio de Armas prohíbe transferencias -incluido el tránsito- de material militar a países que puedan usarlo para cometer crímenes de guerra

Tras ello, la Cadena SER informó de una compra de 15 millones de balas israelíes por más de seis millones de euros, adjudicada el pasado 21 de octubre, según se puede comprobar a través de datos públicos. La difusión de esta información provocó la reacción del Ministerio de Interior español, que anunció el inicio de un proceso “para anular dicha compra”, sin dar detalles sobre las condiciones de la claúsula de cancelación del contrato.

El 28 de octubre Sudáfrica entregó a la Corte Internacional de Justicia “nuevas pruebas sobre acciones genocidas en Gaza”. También hace unos días la relatora de Naciones Unidas para los Territorios Palestinos, Francesca Albanese, presentó un nuevo informe de 35 páginas en el que documenta con detalle “los patrones de conducta” que muestran la intención de Israel de emplear “actos genocidas”. Albanese señala que desde su informe anterior, publicado en marzo, “los actos genocidas se han multiplicado”.

Según cifras oficiales, ya hay al menos 43.204 muertos y 101.641 personas heridas en Gaza desde el 7 de octubre de 2023. A estas cantidades habría que añadir un número indeterminado de desaparecidos bajo los escombros, así como las muertes provocadas por el bloqueo intencionado de ayuda humanitaria por parte de Israel, que está causando hambre y enfermedades. Expertos en salud pública calculan que el número de fallecidos por causas directas e indirectas podría superar los 180.000. A pesar de las denuncias, siguen registrándose nuevas matanzas de civiles.