El presidente norteamericano Joe Biden se ha reunido cara a cara con su homólogo israelí Benjamin Netanyahu este jueves al mediodía (hora local). Biden, que ha recibido a ‘Bibi’ en el Despacho Oval, no había vuelto a hablar en persona con su socio desde que vistió Israel después del ataque del 7 de octubre. A pesar de que en los últimos meses la relación entre ambos socios se había deteriorado, hoy los dos líderes han escenificado un encuentro amistoso.
“Quiero agradecerte los 50 años de servicio público y 50 años de apoyo al estado de Israel”, ha dicho Netanyahu a Biden durante el encuentro, al cual lo ha vuelto a elogiar por ser un “sionista irlandés americano”. Etiqueta a la que Biden ha correspondido con una sonrisa. Netanyahu se ha mostrado especialmente complaciente con su socio norteamericano, igual que hizo ayer ante el Congreso estadounidense, al que pidió que le enviará más armas y más deprisa para poner fin al conflicto. “Dadnos las herramientas y terminaremos el trabajo”, dijo.
El Instituto Judío para la Seguridad Nacional de América ha publicado esta semana un recuento de las entregas públicamente conocidas: entre las armas estadounidenses que se han enviado desde el 7 de octubre hay 20.000 bombas no guiadas, unas 2.600 bombas guiadas y 3,000 misiles de precisión, así como aviones, municiones y defensas aéreas. Todo este arsenal ha sido enviado mientras Biden amenazaba delante de las cámaras a su socio con limitar los envíos y marcaba líneas rojas que cada vez se desdibujaban más ante los avances del ejército israelí en Rafah.
Mientras que Netanyahu parece que ha centrado su visita a Washington para pedir más armamento, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, aseguraba en la rueda de prensa paralela a la reunión que Biden pretende presionar a su socio para que haga las concesiones finales y se pueda llegar ya a un acuerdo de alto el fuego. Según Kirby, las negociaciones están más cerca que nunca de llegar a un acuerdo para conseguir la pausa humanitaria y liberar a los rehenes. Biden ha declinado hacer comentarios sobre la gestión de la guerra mientras iniciaba la reunión con Netanyahu y ha delegado la tarea en Kirby.
“Es hora de acabar la guerra”
“Es hora de acabar la guerra y una de las principales cosas de las que el presidente hablará hoy con el primer ministro es cómo llegamos allí, cómo acabamos esta guerra y la mejor manera, según su punto de vista, es conseguir este acuerdo,” ha remarcado el portavoz de la Casa Blanca. El encuentro entre Biden y Netanyahu se produce en el noveno mes de guerra y cuando la cifra de palestinos muertos bajos las bombas israelís ya se eleva a más de 39.000. Ayer, el primer ministro israelí, se excusaba asegurando que su ejército hace todo lo posible para evitar las bajas civiles.
Kirby, que ha asegurado que el objetivo de Estados Unidos es presionar a Israel para acelerar el curso de las negociaciones, ha intentado restar responsabilidad a Tel Aviv en la dilatación de estas. “Los israelíes ya han hecho muchas concesiones para llegar a este punto,” ha dicho, y ha añadido que “Hamás, a través de sus interlocutores, ha hecho concesiones para llegar a este punto. Y, aun así, todavía no estamos allí. Así que todavía hacen falta más concesiones.
La Casa Blanca tampoco ha tenido problemas en asegurar que Irán está financiando y promoviendo las protestas contra la guerra de Gaza que han inundado las universidades del país en los últimos meses. Este miércoles la capital estadounidense también se llenó de banderas palestinas durante las protestas contra la visita del primer ministro israelí. Mientras a fuera del Capitolio miles de personas se manifestaban, dentro Netanyahu los atacaba diciendo que eran los “tontos útiles de Teherán” y aseguraba que Irán estaba tras las movilizaciones.
Aparte de reunirse con Biden, esta tarde también está previsto que Netanyahu se encuentre con la vicepresidenta Kamala Harris. La visita del primer ministro israelí ha coincidido con uno de los momentos de mayor agitación de la campaña electoral del país tras la renuncia de Biden a la candidatura demócrata, la cual ahora ha asumido Harris.
A lo largo de los tres años y medio de mandato, Harris ha mantenido una postura más crítica con Israel que Biden. La reunión de hoy puede servir para tantear como Harris enfocará el conflicto palestino de cara a la campaña.