Los estudiantes, chicos y chicas, de una prestigiosa universidad de Teherán comieron juntos este lunes, ignorando la segregación por sexos que imponen los estrictos códigos de conducta de Irán y después de que las autoridades cerrasen el comedor para impedirlo.
Sentados juntos en el suelo, con largas telas como manteles, los estudiantes de la Universidad Tecnológica de Sharif compartieron el almuerzo en un gesto de desafío que se suma a las protestas que desde hace semanas atraviesan el país por la muerte de Mahsa Amini, la joven que falleció tras haber sido detenida por la policía moral por llevar mal puesto el velo.
“Los universitarios, como una familia, comieron juntos en la universidad, tras el cierre del comedor”, informó el diario del centro educativo Sharif Today. Al texto le acompañaban dos fotografías que mostraban a chicos y chicas comiendo juntos en el suelo del patio de la universidad.
El estricto código de conducta de la República de Irán establece que los colegios e institutos separen a niños y niñas, mientras que las universidades admiten a estudiantes de ambos sexos, pero mantiene los comedores separados.
Más protestas
Este nuevo desafío a las normas impuestas por el régimen iraní llega después de que durante el fin de semana se produjeran incidentes en esta universidad, escenario a principios de octubre de fuertes choques con las fuerzas de seguridad, lo que había llevado a las autoridades a suspender las clases presenciales hasta el pasado sábado.
En la misma jornada de su reapertura, estudiantes femeninas entraron al comedor masculino con velos, rompiendo las normas de segregación de sexos, y 33 alumnos fueron expulsados. El domingo, los estudiantes protestaron por las expulsiones y, según vídeos sin verificar, fueron atacados por miembros de la Basij, la milicia de voluntarios islámicos. La respuesta de los estudiantes fue comer este lunes en el suelo del centro, una situación que se repitió en otras universidades iraníes.
Así fue en la Universidad de Ciencias Médicas de Isfahan, donde tras dos horas de protesta los estudiantes masculinos y femeninos lograron comer juntos en el comedor, según vídeos compartidos en redes sociales sin verificar.
Las protestas que Irán vive desde mediados de septiembre están protagonizadas sobre todo por jóvenes y mujeres al grito de “mujer, vida libertad”. Durante las manifestaciones se lanzan consignas contra el Gobierno y se queman velos, uno de los símbolos de la República Islámica, algo impensable no hace mucho.
Las universidades se han convertido en uno de los principales puntos de unas protestas, cuya represión ha causado al menos 108 muertos, según la ONG Irán Human Rights, con base en Oslo.