La exvicepresidenta de la Eurocámara implicada en el Qatargate sale de la cárcel con un brazalete electrónico

Irene Castro

Bruselas —
14 de abril de 2023 11:32 h

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La exvicepresidenta del Parlamento implicada en la trama de corrupción bautizada como Qatargate ha abandonado la cárcel belga en la que permanecía desde el pasado mes de diciembre. La socialista griega Eva Kaili aguardará hasta el juicio bajo el régimen de libertad vigilada con un brazalete electrónico, aunque las autoridades belgas revisarán la decisión dentro de dos meses. Era la última implicada en la trama que permanecía entre rejas dado que el resto de involucrados fueron saliendo a cuenta gotas en las últimas semanas.

Los periodistas esperaban a Kaili a las puertas de su domicilio en Bruselas y se ha limitado a decir que continuará la lucha con sus abogados, que llevan desde el comienzo del proceso clamando por su inocencia. Kaili fue detenida en diciembre en el marco de una operación judicial por la trama de sobornos procedentes de Marruecos y Qatar a varios eurodiputados. Aquel día la policía registró despachos en la Eurocámara, se produjeron interrogatorios y varias detenciones, entre ellas la de Kaili, pese a que gozaba de inmunidad. El juez argumentó que había sido pillada en flagrante delito al haber avisado a su padre, que trató de huir con una maleta llena de billetes.

Con la liberación de Kaili, que es la implicada en la trama corrupta de mayor rango político, no queda ninguno de los involucrados entre rejas. El primero en abandonar la prisión fue precisamente su pareja, Francesco Giorgi, que era el asistente parlamentario de uno de los eurodiputados bajo sospecha. Giorgi fue de los primeros en asumir su responsabilidad durante los interrogatorios y trató de exonerar a la dirigente griega.

También abandonó recientemente la cárcel Antonio Pier Panzeri, que fue el jefe de Giorgi en la anterior legislatura y ahora estaba al frente de la ONG Fight the Impunity. Considerado el cabecilla de la trama, Panzeri llegó a un acuerdo con la justicia belga para la reducción de su condena a cambio de tirar de la manta.

Esta semana salió el eurodiputado Marc Tarabella, que entró en prisión en febrero tras el levantamiento de su inmunidad. El otro político implicado, el socialista italiano Andrea Cozzolino, permanece bajo arresto domiciliario en su país, donde se fue después de que fuera levantada su inmunidad en febrero a la espera de la extradición.

El estallido del Qatargate convulsionó a las instituciones europeas, fundamentalmente al Parlamento, al que había rodeado una trama con la que Qatar y Marruecos pretendían comprar voluntades. Tanto la presidenta de la Eurocámara, Roberta Metsola, como los grupos políticos aseguraron que pondrían en marcha nuevas medidas de control para evitar casos de corrupción, pero la mayoría siguen sin haberse aprobado.