Muere el británico James Le Mesurier, cofundador de los Cascos Blancos de Siria
El británico James Le Mesurier, cofundador e importante colaborador de la organización humanitaria Defensa Civil Siria (SCD, por sus siglas en inglés), también conocida como los Cascos Blancos sirios, ha sido hallado muerto este lunes en su residencia en Estambul, en circunstancias aún sin esclarecer.
Fuentes policiales han confirmado al diario turco Sözcu que el cuerpo sin vida de Le Mesurier, un exoficial del Ejército británico y exfuncionario de Naciones Unidas, de 48 años, fue encontrado en el jardín de su residencia a las 02.30 GMT. Empleados públicos que avistaron el cuerpo desde una mezquita cercana avisaron a las autoridades turcas.
La organización ya ha expresado su conmoción vía Twitter. “La familia siria SCD expresamos nuestro más profundo pesar y solidaridad con la familia de James. También debemos elogiar sus esfuerzos humanitarios, que los sirios siempre recordarán”, ha sido el mensaje publicado en la red social.
Los Cascos Blancos sirios, apoyados por la ONG Mayday Rescue Foundation que Le Mesurier fundó en 2014, desarrollan labores de rescate en las zonas de Siria fuera del control del gobierno de Bashar al Asad. Sus voluntarios han salvado más de 60.000 vidas, además de ayudar en tareas de reconstrucción de infraestructura pública y en educar a la población sobre medidas de seguridad durante bombardeos.
En 2016 fueron galardonados con el Nobel Alternativo, en reconocimiento a su activismo humanitario. El fallo resaltó la “excepcional valentía, sensibilidad y compromiso humanitario para rescatar civiles” en el conflicto que afecta a Siria. La fundación que concede el galardón destacó que más de un centenar de voluntarios habían fallecido mientras ayudaban en tareas de rescate, y los calificó como un “faro de esperanza en medio de la tragedia humana de la guerra civil siria”.
El Gobierno de Damasco y sus aliados, Rusia e Irán, han acusado a la organización de infiltrar agentes extranjeros y colaborar con terroristas. La semana pasada, el Ministerio de Exteriores ruso, en concreto, la Directora del Departamento de Información y Prensa y portavoz Maria Zakharova, acusó a Le Mesurier de haber trabajado como espía para el M16 británico. Aseguró que había sido visto “en todo el mundo, incluyendo los Balcanes y Oriente Medio”. “Sus conexiones con grupos terroristas fueron denunciadas durante su misión en Kosovo”, afirmó.