China redobla su apuesta por convertirse en mediador en Ucrania entre buenas palabras de Zelenski y Moscú
“Se suele decir que estas conversaciones abren oportunidades. Existe la oportunidad de utilizar la influencia política de China para restablecer la solidez de los principios y normas en los que debe basarse la paz”, dijo el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski tras la llamada de este miércoles con su homólogo chino, Xi Jinping.
La conversación estuvo centrada en las posibles vías de cooperación para alcanzar la paz y ambos dirigentes reconocieron la “oportunidad” del momento, avivando las esperanzas de un progreso en el ámbito de las negociaciones.
Xi quiere convertirse en el actor fundamental que traiga la paz entre Rusia y Ucrania, pero hasta ahora muchos habían cuestionado sus esfuerzos ante la ausencia total de contactos con Zelenski. 14 meses después del inicio de la invasión, la esperada llamada ha llegado. Esta semana, fuentes del Gobierno ucraniano insistían en Madrid en la idea de que el conflicto acabará en algún momento en la mesa de negociación.
“Ahora que el pensamiento y las voces racionales están en alza, es importante aprovechar la oportunidad y crear las condiciones favorables para la resolución política de la crisis”, informó el Ministerio de Exteriores chino tras la conversación. “China seguirá facilitando las conversaciones de paz y esforzándose por lograr un pronto alto el fuego y el restablecimiento de la paz”, añadió.
Por su parte, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ha señalado que Rusia da la bienvenida a la llamada, pero insiste en que sus objetivos de guerra no han cambiado. “Estamos dispuestos a acoger cualquier cosa que pueda acelerar el fin del conflicto en Ucrania y que Rusia alcance todos los objetivos que se ha fijado”, ha dicho Peskov. Este viernes, Rusia ha lanzado una nueva oleada de misiles sobre varias ciudades de Ucrania y ha provocado más de una decena de fallecidos.
La llamada llega justo dos meses después de la publicación de la 'Posición china sobre el acuerdo político de la crisis en Ucrania'. El documento de 12 puntos nace como una recopilación de las posiciones de China en el último año para intentar desmentir las acusaciones de ser un actor prorruso, pero posteriormente ha sido interpretado como una posible base para iniciar negociaciones, ya que tanto Rusia como Ucrania han mostrado puntos en común.
Después de la visita de Xi a Moscú, la llamada con Zelenski era algo esperado, dice a elDiario.es Inés Arco, investigadora del think tank CIDOB especializada en Asia Oriental y política china. “Una de las cuestiones que ha marcado ese momento de espera es que hemos tenido muchas visitas de líderes europeos e internacionales a Pekín donde la posición china en la guerra ha sido uno de los principales debates. Que esa llamada se haya dado después de todas esas visitas muestra a Pekín como un actor que tiene receptividad a las propuestas europeas y lo retrata como un actor responsable”.
El presidente español, Pedro Sánchez; el francés, Emmanuel Macron; y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen han visitado Pekín en las últimas semanas. También se han producido visitas de líderes no europeos, como el viaje de Lula da Silva, presidente de Brasil, o las visitas de los líderes de Singapur y Malasia.
En su visita a Pekín el pasado mes de marzo, Sánchez, solicitó a su homólogo chino que hablara con Zelenski para conocer su propuesta de paz. “Nadie hasta ahora le había dicho a Xi en persona que hable con Zelenski”, declararon a elDiario.es fuentes del Gobierno durante la reunión entre el presidente español y el chino: “La guerra no le conviene, y puede desempeñar un papel en contribuir a que pare”.
Lula, por su parte, apoya la postura de China y ha viajado a Europa abogando por la creación de un “G20 por la paz”, es decir, una alianza de los países considerados neutrales y a favor del inicio de conversaciones.
“Aunque es inútil esperar una solución política o el fin de la guerra en Ucrania a corto plazo, una coalición de Estados con buenos contactos tanto en Moscú como en Kiev debería acordar un esfuerzo conjunto para presionar a ambas partes para que lleven a cabo medidas paliativas en la línea propuesta en el documento de posición de China”, señala a elDiario.es Stein Tønnesson, investigador del Peace Research Institute of Oslo. “Esos canales y medidas de mitigación pueden a su vez resultar útiles en el futuro, cuando sea posible hablar de paz”. En ese sentido, el investigador considera que la llamada telefónica “debería haberse producido mucho antes, pero es una buena señal”.
China informó tras la llamada con el presidente ucraniano que enviará al representante especial del Gobierno para asuntos euroasiáticos a Ucrania y otros países para mantener “conversaciones en profundidad” con todas las partes sobre el acuerdo político. “Se trata de una figura creada específicamente a raíz del conflicto para tener un punto de mediación”, aclara Arco. “Que se acepte el envío de esa figura sugiere que la llamada ha sido una petición de consentimiento”, añade.
Otro de los elementos que destaca la investigadora es la frase en la que China afirma que su “principal objetivo es facilitar las conversaciones”. “Eso no aparecía en los 12 puntos previos [del plan de paz]. Se decía que la comunidad internacional tenía que promoverlo, pero China no se posicionaba como posible actor para iniciar ese diálogo”, dice Arco. “Facilitar no es mediar, sino hacer algo similar como lo que ha hecho entre Irán y Arabia Saudí, lo que supondría no intervenir ni forzar a Rusia a aceptar determinadas medidas”.
“La gran cualidad poco destacada del documento de posición de China del 24 de febrero fue su concreción y modestia. No sugería ninguna solución al conflicto, lo que habría sido inútil”, dice Tønnesson. “Los autores debieron darse cuenta de que no se vislumbraba ninguna solución en el horizonte. En su lugar, propusieron un cierto número de medidas de mitigación, casi todas ellas constructivas y sensatas, y la mayoría de las cuales podrían ser acordadas entre Rusia y Ucrania –o aplicadas unilateralmente por cada una de ellas– mientras siguen luchando”, añade.
Cambio de discurso de EEUU
Arco señala que los esfuerzos de China responden a un esfuerzo real que ha ido tomando forma con el paso de las semanas y las visitas de líderes internacionales. “China considera que tiene que ser una potencia responsable para mejorar su imagen. Es muy posible que dentro de Occidente estos primeros pasos se vean con reticencias, ya que muchos consideran que su posición no es neutra, pero frente al sur global se está posicionando como este actor responsable que mira por la paz”.
En este sentido, el portavoz de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Kirby, ha señalado que la llamada telefónica entre ambos líderes “es una buena cosa”. “Si eso va a conducir a algún tipo de movimiento de paz significativo, plan o propuesta, simplemente no creo que lo sepamos en este momento”.
El cambio de discurso estadounidense es evidente. Cuando China publicó el documento de 12 puntos en febrero, el presidente Biden dijo: “Putin lo aplaude, así que ¿cómo podría ser algo bueno? No he visto nada en el plan que indique que haya algo que sea beneficioso para cualquiera que no sea Rusia”.
“Esperamos que China continúe jugando un papel beneficioso”, ha señalado el portavoz adjunto del secretario general de la ONU. “Alentamos la participación de todas las naciones clave del mundo, incluido por supuesto los miembros del Consejo de Seguridad, en las contribuciones que puedan hacer a la resolución de la crisis que afecta a Rusia y Ucrania”.
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