El Gobierno británico pide a las escuelas de Inglaterra que no usen material anticapitalista en la enseñanza
El Gobierno británico ha ordenado a los colegios de Inglaterra que no utilicen material de organizaciones anticapitalistas, según ha informado The Guardian. La guía del Ministerio de Educación, emitida el jueves y destinada a dirigentes escolares y profesores que participan en el desarrollo del plan de estudios sobre educación sexual y salud, califica el anticapitalismo como una “postura política extrema”. También lo equipara con la oposición a la libertad de expresión, el antisemitismo y el apoyo a las actividades ilegales.
“Las escuelas no deben, bajo ninguna circunstancia, utilizar recursos producidos por organizaciones que adopten posturas políticas extremas en la materia”, indica la guía. “Esto es así incluso si el material en sí no es extremo, ya que el uso del mismo podría implicar el respaldo o apoyo de la organización”.
Las directrices del ministerio enumeran varios ejemplos de lo que se considera “posturas políticas extremas”, como “un interés declarado públicamente en eliminar o derrocar la democracia, el capitalismo, o de poner fin a las elecciones libres y justas”, así como “la oposición a la libertad de expresión; el uso de lenguaje racista, incluido el antisemita; el respaldo de actividades ilegales; y el no condenar las actividades ilegales efectuadas en apoyo de su causa”.
El documento ha desencadenado numerosas críticas. El exportavoz de Economía de la oposición laborista, John McDonnell, considera que las medidas prohíben en la práctica la referencia en las escuelas a acontecimientos clave de la historia británica, y que simbolizan el creciente “autoritarismo” dentro del partido conservador.
“Bajo esta premisa, será ilegal referirse a grandes partes de la historia y la política británicas, incluyendo la historia del socialismo británico, el Partido Laborista y el sindicalismo, que en diferentes momentos han abogado por la abolición del capitalismo”, dice McDonnell. “Es otro paso en la guerra cultural. La deriva hacia el autoritarismo conservador extremo está acelerándose y debería preocupar a cualquiera que crea que la democracia requiere libertad de expresión y una población educada”.
Para el escritor y activista Tariq Ali, la nueva guía es un signo de “bancarrota moral y política”, pero cree que la medida será inútil. “Si pones cosas en una lista prohibida, muchos jóvenes pueden acceder a ellas por Internet y leerlas. Prohibirlas en las escuelas no funcionará en absoluto”
Se sobreentiende que el Ministerio deja claro que las escuelas no deben trabajar con organizaciones que adopten posiciones extremas y que los profesores deben ser políticamente imparciales.
“Nuestra nueva guía sobre relaciones, educación sexual y salud prepara a todas las escuelas para proporcionar una enseñanza integral en estas áreas de una manera apropiada para cada edad”, ha dicho el secretario de Estado británico de Educación, Nick Gibb. “Estos materiales deben dar a las escuelas la confianza para construir un plan de estudios que refleje la diversidad de puntos de vista y trasfondos, al tiempo que fomenta el respeto de todos los alumnos por los demás, la idea de relaciones saludables y la capacidad de cuidar de su propio bienestar”.
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