El Parlamento de Hungría ha aprobado este lunes la ratificación de la entrada de Suecia en la OTAN, levantando el último obstáculo que afrontaba el país escandinavo para integrarse como miembro de pleno derecho en la Alianza Atlántica.
Tras bloquear durante más de un año y medio su luz verde con diversos argumentos, se esperaba que los diputados del gobernante partido conservador Fidesz del primer ministro, el ultranacionalista Viktor Orbán, aprobaran la ratificación. Su voto era decisivo ya que ocupan dos tercios de los escaños parlamentarios.
La ratificación, transmitida en directo en la página web del Parlamento, ha sido aprobada con 188 votos a favor y seis en contra. “La entrada de Suecia a la OTAN fortalece la seguridad de Hungría, por lo que pido que apoyen la propuesta”, ha dicho Orbán en la apertura de la sesión parlamentaria de este lunes.
Hungría es así el último miembro de la OTAN en aceptar la entrada de Suecia en la Alianza, después de que Turquía, que también mantuvo fuertes reticencias durante meses, lo hiciera a finales de enero. Para su entrada en vigor, la ratificación requiere aún de la firma del jefe del Estado, una formalidad que se espera haga efectiva esta vez el presidente del Parlamento, László Köver, debido a que la jefa de Estado de la República, Katalin Novák, ha dimitido.
El primer ministro sueco, Ulf Kristersson, ha calificado la ratificación de “histórica” en la red social X (antes Twitter). “Un día histórico. Los parlamentos de todos los países de la OTAN han votado ahora el ingreso de Suecia. Estamos listos para asumir nuestra parte de la responsabilidad en la seguridad de la OTAN”, dice.
También ha reaccionado pronto el secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg. “Acojo con satisfacción el voto del Parlamento húngaro para ratificar el ingreso de Suecia en la OTAN. Ahora que todos los aliados lo han aprobado, Suecia se convertirá en el 32º Aliado de la OTAN. La adhesión de Suecia nos hará a todos más fuertes y seguros”, ha escrito en X.
El Gobierno de Orbán y los diputados del Fidesz justificaron el retraso de su voto con que políticos suecos habían criticado de una manera considerada “injusta” la deriva antidemocrática en Hungría.
Tras recibir el pasado viernes al primer ministro sueco, Orbán anunció que el Parlamento de Budapest se reuniría para adoptar las decisiones necesarias y así “cerrar una etapa”. Después de ese encuentro, Orbán y Kristersson explicaron a la prensa que Hungría comprará otros cuatro cazas Gripen de fabricación sueca, que se unirán a los 14 que ha venido recibiendo en régimen de alquiler desde 2006.
Suecia y Finlandia renunciaron a su tradicional neutralidad después de que Rusia invadiera Ucrania en febrero de 2022, y en junio de ese año solicitaron la admisión en la OTAN.
Hungría y Turquía ratificaron la entrada de Finlandia en marzo de 2023, pero mantuvieron a Suecia a la espera.
El Gobierno de Orbán había prometido, hasta la ratificación por parte de Turquía, que su país no iba a ser el último en votar sobre la adhesión de Suecia a la Alianza, algo que finalmente no cumplió. El Parlamento turco dio su luz verde a finales del mes pasado.
Con información de la agencia EFE.