Escocia es en estos días la Meca de todo movimiento independentista. Delegaciones de los distintos territorios que aspiran a independizarse de sus respectivos estados han llegado a Edimburgo y Glasgow para ver de cerca el desarrollo de un referéndum que se ha convertido en el espejo en que se miran.
Algunos incluso han participado en la campaña pro independentista. Representantes de la coalición vasca Bildu repartieron ayer propaganda a favor del ‘sí’ junto con miembros del partido ecologista escocés.
Grupos catalanes, vascos, sardos y quebequeses, entre otros, participarán en la noche del jueves en el acto de cierre de campaña del Radical Independence al que seguirá una reunión de grupos independentistas internacionales.
“Aquí en Escocia hemos recibido mucha solidaridad y deseos de que podamos votar”, comenta Elena Jiménez, responsable de comunicación de la organización catalana Ómnium Cultural.
En parte sus destinos están unidos porque, aunque cada caso es distinto, ninguno pone en duda que el resultado del jueves tendrá efectos en la opinión pública. En el caso de la consulta catalana del próximo 9 de noviembre pueden ser inmediatos.
“Si saliera el sí y la gente ve que es posible será un aliciente para los que aún no se han decidido. Si aquí sale sí y se comienza con las negociaciones de manera normal se puede marcar un precedente muy fuerte”, continúa Jiménez.
Muriel Casals, presidenta de esa organización cultural catalana, que está en plena campaña por el sí en la consulta convocada para el 9 de noviembre, permanecerá tres días entre Glasgow y Edimburgo. Se ha entrevistado con miembros de Women for Independence (Mujeres por la independencia) y Business for Independence (Empresas por la independencia) así como con Yes Scottland.
“Estamos interesados por lo que ocurre aquí. Para nosotros lo importante es que aquí se va a hacer un referéndum con toda normalidad del juego democrático. Es muy emocionante ver el respeto con el que se tratan los del sí y los del no. Además, vemos que nadie, ni el más radical, no pone en duda el derecho de los escoceses a tomar el futuro de su país en sus manos”, explica.
El gobierno vasco, en tour por Edimburgo
Además, una delegación del Gobierno vasco, encabezada por la secretaria General de Acción Exterior, Marian Elorza, se ha reunido estos días con el máximo responsable para las relaciones con Europa y el Reino Unido del gobierno escocés, Colim Imrie, con una representación parlamentaria escocesa del Partido Conservador y del Scottish National Party. También se encontraron con el magistrado y profesor universitario David Edward, autor de un informe sobre la posición escocesa ante la UE.
“Observar y aprender de un buen modelo para resolver el problema que tiene Euskadi, el problema nacional vasco”, dijo el presidente del PNV, Andoni Ortuzar. “Siempre hemos dicho que el modelo escocés es bueno porque se basa en tres pilares que para nosotros son fundamentales: primero el acuerdo entre diferentes, segundo la democracia y tercero la voluntad de la ciudadanía”, continuó.