Un equipo de policías y expertos forenses turcos han entrado este lunes en el consulado de Arabia Saudí en Estambul junto a varios investigadores saudíes para llevar a cabo una investigación sobre la desaparición del periodista crítico saudí Jamal Khashoggi, del que no se tiene noticia desde que el pasado día 2 entró en el edificio.
Según informa la emisora NTV, varios agentes de Policía, acompañados de forenses, se han unido al equipo de saudíes que ya se encontraba dentro del edificio. La decisión de realizar un registro conjunto se tomó tras la conversación telefónica anoche entre el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y el rey saudí, Salman bin Abdulaziz.
Turquía pidió y recibió hace una semana permiso para entrar en el edificio, dentro de su investigación para localizar el paradero del periodista. La Policía y los servicios secretos turcos están investigando ahora si el periodista fue asesinado dentro del edificio, como denuncian compañeros de profesión de Khashoggi, y si su cuerpo fue disuelto con ácido.
El periodista crítico saudí Jamal Khashoggi desapareció el pasado día 2 tras entrar en el consulado de su país en Estambul para solicitar unos documentos. Riad afirma que el reportero abandonó el edificio poco después de entrar y niega tener ninguna responsabilidad en su desaparición.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ha insinuado este lunes que “asesinos por cuenta propia” podrían estar detrás de la desaparición del periodista. “Me parece que quizás estos podrían haber sido asesinos por cuenta propia, quién sabe. Vamos a tratar de llegar al fondo (del asunto) muy pronto”, ha señalado Trump ante los periodistas antes de embarcar en el avión presidencial rumbo al estado de Florida.
Trump ha hecho estas declaraciones después de asegurar que el rey saudí, Salmán bin Abdelaziz, le dijo por teléfono que desconoce qué ha sucedido con Khashoggi, un periodista que escribía para el diario “The Washington Post” y que, según sus familiares y amigos, fue presuntamente asesinado en el consulado de su país en Turquía.
Asimismo, Trump ha confirmado ante la prensa que el secretario de Estado, Mike Pompeo, viajará este lunes a Riad para reunirse con el rey Salmán y tratar la desaparición del periodista, que se distanció de la monarquía cuando el actual príncipe heredero, Mohamed bin Salman, ascendió a posiciones de poder.
El pasado día 2, Khashoggi entró al consulado del reino en Estambul para recoger unos documentos que necesitaba para poder casarse con su novia turca, que se quedó esperando fuera del edificio. Desde entonces, no se tiene noticia del paradero del periodista, que era crítico con la monarquía saudí.
La semana pasada, amigos de Khashoggi aseguraron tener la certeza de que el periodista fue asesinado en el consulado e incluso de que su cadáver fue troceado y sacado en maletas, pero el Gobierno turco no ha comentado oficialmente esas acusaciones y Riad las niega.
De acuerdo a The Washington Post, el Gobierno turco habría informado a las autoridades de Estados Unidos de que disponía de grabaciones de vídeo y audio que demostrarían que el periodista fue asesinado en el consulado. Líderes mundiales como el secretario general de la ONU, António Guterres, o el presidente francés, Emmanuel Macron, entre otros, han pedido que se esclarezcan las causas de la desaparición.