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Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

Israel ultima la invasión de Gaza y los bombardeos dejan un millón de palestinos desplazados

“Estamos preparando el terreno para una operación lo más efectiva posible”, ha señalado este domingo, el jefe de la fuerza aérea israelí, el general Tomer Bar. “Haremos lo que sea necesario, de manera agresiva, para que si se decide maniobrar, permitamos la mejor entrada terrestre que dé a las tropas libertad de movimiento operativo”, ha añadido.

El Ministerio de Sanidad de Gaza ha actualizado la cifra de fallecidos hasta alcanzar los 2.670 muertos e Israel ha vuelto a pedir a toda la población del norte (más de un millón de personas) que evacúe hacia el sur a través de lo que ha llamado “corredor de evacuación”.

Juliette Touma, directora de comunicaciones de UNRWA (la agencia de la ONU para los refugiados palestinos), señaló este sábado que un millón de personas se han visto desplazadas en Gaza en una semana de combates. “Necesitamos acceso humanitaria en Gaza. No se ha permitido a ninguna agencia humanitaria, incluida la UNRWA, introducir asistencia”.

Israel ultima una ofensiva terrestre en Gaza, pero no ha anunciado los tiempos. En una visita a las tropas desplegadas en la frontera, el primer ministro, Benjamin Netanyahu, dijo este sábado a sus soldados: “¿Estáis preparados para lo que viene? Se viene más”. “Nos estamos desplegando sobre la Franja de Gaza con nuestras fuerzas terrestres y nos preparamos para la siguiente fase de las operaciones”, ha señalado este domingo el portavoz militar Jonathan Conricus.

“Hamás pensaba que nos iba a romper, pero nosotros romperemos a Hamás”, ha señalado Netanyahu en el primer gabinete de unidad nacional para afrontar la guerra. “Nuestra unidad manda un mensaje claro al pueblo, al enemigo y al mundo”.

El ministro de Defensa, Yoav Gallant, ha señalado en rueda de prensa que esta “será una guerra feroz, mortífera, precisa y que cambiará la situación de forma permanente”. “Esta es una guerra de los hijos de la luz contra los hijos de la oscuridad”, ha añadido el ministro, que ha prometido “eliminar a Hamás” porque no aceptan la existencia de Israel, “son humanos salvajes, bestias que han asesinado soldados niños y ciudadanos”. “Mientras no les hayamos eliminado, no habremos terminado la misión”, ha concluido.

Un análisis de imágenes aéreas y publicaciones en redes sociales, realizados por la agencia de investigación con sede en Londres, Forensic Architecture, prueba que un convoy de vehículos que transportaba a civiles que huían en Gaza, y que fue alcanzado por un mortal ataque aéreo, circulaba por una de las dos carreteras señaladas por Israel como “rutas seguras” hacia la mitad sur de la franja, según ha publicado The Guardian. Vídeos y fotografías del momento posterior al ataque muestran 12 cadáveres, la mayoría de ellos mujeres y niños, el más pequeño de unos dos años, y varios vehículos dañados.

Israel alega que Hamás está bloqueando el paso a la gente que trata de huir al sur y señala que la información sobre los civiles muertos evacuando el norte es manipulación de Hamás y niega que eso haya ocurrido. “Nosotros no hemos atacado a propósito, puede haber sido algún tipo de accidente, que yo dudo”, ha señalado el portavoz militar sobre una explosión sobre el corredor utilizado por los civiles.

El Ejército israelí ha confirmado también que entre los 1.300 fallecidos en el ataque de Hamás, al menos 289 son soldados. También han informado que el número confirmado de rehenes israelíes en Gaza es de 126.

“No debemos perder de vista el hecho de que la inmensa mayoría de los palestinos no tiene nada que ver con los terribles ataques de Hamás y están sufriendo como resultado”, ha señalado este domingo el presidente de EEUU, Joe Biden, que ha mostrado un firme apoyo al “derecho de Israel a defenderse”. EEUU incluso ha evitado las palabras “desescalada”, “fin de la violencia” o “vuelta a la calma”, según un correo del Departamento de Estado a los diferentes portavoces del que ha informado la cadena NBC.

El Consejo Europeo, que se reúne el martes, ha emitido este domingo un comunicado enfatizando “el derecho de Israel a defenderse en el marco del derecho internacional humanitario”. Los 27 piden la liberación de todos los rehenes de Hamás y reiteran “la importancia del suministro de asistencia humanitaria urgente” en Gaza.

Hamás ha seguido lanzando cohetes desde Gaza y uno de ellos ha provocado un incendio en Sderot, una de las poblaciones israelíes atacadas por el grupo el sábado pasado. Varios residentes de la población de más de 30.000 personas, situada a aproximadamente un kilómetro de la frontera con Gaza, han evacuado la ciudad en autobuses este domingo.

El ministro de Energía israelí, Israel Katz, ha señalado que Israel ha restablecido el servicio de agua en algunas zonas del sur de la Franja de Gaza. “La decisión de abrir las aguas en el sur, acordada entre Netanyahu y el presidente Biden, provocará un desplazamiento de la población civil hacia el sur de la Franja de Gaza y permitirá reforzar el asedio general en Gaza en las áreas de electricidad, agua y combustible y facilitará que el Ejército opere y destruya la infraestructura nazi de Hamás”, ha señalado el ministro.

Enfrentamientos en el norte

Israel ha declarado zona cerrada una franja con una anchura de cuatro kilómetros a lo largo de la frontera libanesa, tras una semana de intercambio de disparos y artillería con la milicia chií Hizbulá y grupos palestinos basados en Líbano. Los enfrentamientos se han intensificado este domingo.

“Evaluando la situación y el reciente incidente de disparos en el norte de Israel, se ha cerrado un área de hasta 4 kilómetros a partir de la frontera con Líbano. Las Fuerzas Armadas subrayan que está prohibido entrar en este área y pide al público tenerlo en cuenta y no entrar”, señala un comunicado difundido por el Ejército israelí. Los civiles que viven a dos kilómetros de la frontera han recibido la orden de permanecer cerca de un refugio.

Fuego antitanque disparado por Hizbulá ha matado este domingo a una persona en el norte de Israel, a lo que Tel Aviv ha respondido con bombardeos aéreos en territorio libanés. el grupo armado libanés, considerado organización terrorista por Europa y EEUU (al igual que Hamás), ha reivindicado otros cuatro ataques a lo largo de la mañana, al menos uno de ellos dirigido contra un carro de combate israelí. El Ejército israelí confirma que ha sido atacado. También se han lanzado varios cohetes desde Líbano que han dejado varios heridos en Israel.

La misión de la ONU en Líbano ha denunciado el impacto de un cohete en uno de sus cuarteles del lado libanés. “Estamos trabajando para verificas de dónde [venía el cohete]. Los miembros de la misión de mantenimiento de la paz no estaban en los refugios en ese momento. Afortunadamente nadie ha resultado herido”, ha señalado la misión.

Ignacio Álvarez-Ossorio, catedrático de Estudios Árabes e Islámicos en la Universidad Complutense, asegura que no le extrañaría nada que Hizbulá se sumase de alguna manera a la guerra actual. “Ese es el principal temor de Israel, porque saben que Hizbulá se ha rearmado y cuenta con tecnología de la que no disponía en la guerra de 2008. Por eso están enviando buena parte de sus fuerzas hacia el norte de Israel, para tratar de disuadirles de que abran otro frente. Pero si la cosa se pone fea, que se va a poner, no dudarán en involucrarse”.

Estados Unidos está enviando un segundo portaviones a la zona “para disuadir acciones hostiles contra Israel o cualquier esfuerzo por expandir esta guerra tras el ataque de Hamás”, señaló el sábado el secretario de Defensa, Lloyd Austin. “Muestra nuestra determinación para disuadir a cualquier actor estatal o no estatal de escalar esta guerra”. Israel también ha enviado munición a Israel.

Israel llevó a cabo en la noche del sábado un bombardeo sobre el aeropuerto de Alepo que lo dejó fuera de funcionamiento, según informó el ministerio de Defensa sirio. El ministro de Exteriores iraní ha señalado este domingo que si la “agresión a Gaza” no para, hay un posibilidad creciente de expansión de la guerra a otros frentes. Jake Sullivan, asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, también ha alertado de la posibilidad de una expansión del conflicto. “Nos tenemos que preparar para cualquier posible contingencia”.