Al menos 18 personas han muerto y otras cuatro han resultado heridas este lunes en un bombardeo israelí en Aitou, una zona de mayoría cristiana ubicada al sureste de la ciudad de Trípoli, en el norte del Líbano, y que hasta ahora no había sido objetivo de ataques aéreos de Israel, según ha informado la Cruz Roja libanesa.
La organización ha indicado en un comunicado difundido en X que siete equipos de ambulancias se han dirigido a la localidad de Aitou tras el bombardeo, añadiendo que los trabajos de rescate y desescombro continúan. El Ejército de Israel aún no se ha pronunciado sobre el ataque.
La embajada de EEUU en Líbano ha solicitado a todos sus ciudadanos que abandonen Líbano “ahora”, añadiendo que los vuelos que ha organizado la embajada no continuarán de manera indefinida.
La Agencia Nacional de Noticias libanesa (ANN) apunta que este es el primer bombardeo de Israel contra la ciudad de Aitou, perteneciente al distrito de Zgharta, y añade que el ataque tuvo como objetivo un apartamento residencial, mientras medios locales informan de que el inmueble había sido alquilado recientemente.
El alcalde de la localidad ha informado a Reuters de que el edificio había sido alquilado para alojar a familias desplazadas.
A principios de octubre, un bombardeo israelí golpeó por primera vez los alrededores de Trípoli y tuvo como objetivo específicamente el campo de refugiados palestinos de Beddawi, donde un responsable de Hamás fue asesinado junto a otros miembros de su familia.
Israel ha concentrado sus ataques principalmente contra zonas de mayoría chií en el sur y el este del Líbano, pero recientemente ha comenzado a azotar otras comunidades del país mediterráneo, donde conviven 18 sectas de distinto signo y religión.
La campaña de bombardeos masiva de Israel, iniciada a finales de septiembre, se ha cobrado ya más de 2.200 vidas y ha obligado a más de 1,2 millones de personas a abandonar sus hogares para huir de la violencia, según datos proporcionados por el Gobierno libanés.
Este lunes, Israel ha ordenado a los residentes en 25 poblaciones que evacúen sus hogares y se trasladen al norte del río Awali.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha asegurado que el país seguirá atacando “sin piedad a Hizbulá en todo el Líbano, también en Beirut”, después de que ayer un ataque del grupo chií matara a cuatro soldados israelíes e hiriera a otros 67 en la base militar de Golani, junto a la norteña ciudad de Haifa. “Estamos librando una dura campaña contra el eje del mal de Irán, que quiere destruirnos totalmente. No lo conseguirán. Seguimos luchando. Pagamos precios dolorosos, pero tenemos logros tremendos y seguiremos consiguiéndolos”, ha dicho.
Cascos azules de Italia detectan explosivos en una carretera
Entretanto, soldados italianos de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en el Líbano (FPNUL) han detectado este lunes “una serie de artefactos explosivos incendiarios colocados a lo largo de la carretera que conduce a la base operativa avanzada UNP 1-32A”, en el sur del Líbano, informa el Ministerio de Defensa de Roma. El hallazgo de la patrulla del contingente italiano llega tras los recientes ataques israelíes a las fuerzas de paz de la ONU que han causado varios heridos y se produjo durante un movimiento logístico de los cascos azules italianos.
“Un equipo de desactivación de explosivos del contingente, que se encontraba en el lugar, aseguró la zona pero no pudo completar las operaciones de limpieza porque, debido a causas que aún se están averiguando, uno de los artefactos prendió provocando un incendio en los alrededores”, indica el ministerio italiano en un comunicado, en el que añade que no se registraron daños personales ni materiales. “La FPNUL y las autoridades libanesas están llevando a cabo investigaciones para esclarecer la dinámica de los hechos y localizar a los autores y principales responsables de la posible amenaza”, señala el comunicado.
El Consejo de Seguridad de la ONU se reúne este lunes para estudiar la situación en el Líbano, en un momento de máxima tensión tras los repetidos ataques del Ejército israelí a las bases de la misión de la ONU y la exigencia de Israel de que evacuen esas instalaciones.
La situación en el sur del país se agravó este domingo dramáticamente, cuando dos tanques Merkava israelíes derribaron la entrada de una base de la FPNUL en Ramyah e ingresaron en la base de cascos azules; además, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, envió un mensaje grabado a António Guterres en el que le dijo que evacuara las bases de FPNUL.