La viuda de un veterano de la II Guerra Mundial ha comparado los esfuerzos del estado de Florida (EEUU) para prohibir algunos libros de temática LGTBI y antirracistas en las aulas con la Alemania nazi.
Se trata de Grace Linn, que el martes pasado acudió a la reunión del Consejo Escolar del condado de Martin para protestar contra esta nueva normativa en Florida que censura el discurso de género y la teoría crítica de la raza en las aulas y que ha sido aprobada por el gobernador Ron DeSantis.
“Tengo 100 años y enseñé en un instituto algunas habilidades informáticas a los alumnos más mayores”, señala Linn en una intervención en la que ha criticado la política de prohibición de DeSantis. “Mi marido, Robert Nichols, fue asesinado en la II Guerra Mundial con solo 26 años, defendiendo nuestra democracia, constitución y libertades. Una de las libertades que masacraron los nazis fue la de leer libros, que prohibieron y quemaron”.
“La libertad de leer, que está protegida por la Primera Enmienda, es un derecho y un deber esencial de nuestra democracia. Sin embargo, está siendo atacada por grupos públicos y privados que piensan que tienen la verdad. En respuesta a esto, el año pasado hice esta colcha”, ha señalado Linn mientras un hombre enseñaba la tela cosida con diferentes títulos de libros. “La he hecho para recordarnos a todos que estos pocos de los muchos libros que están siendo prohibidos tienen que ser protegidos y leídos por quien lo elija”. La colcha, ha explicado la mujer, apareció en televisión nacional como parte de una campaña contra la prohibición de libros.
“Quemar libros y prohibir libros es lo mismo. Las dos cosas se hacen por la misma razón: miedo al conocimiento. El miedo no es libertad, es control. Mi marido murió como padre de la libertad. Yo soy una madre de la libertad. Los libros prohibidos deben exhibirse con orgullo y protegerse de consejos escolares como este”, ha señalado.
Según la ley que censura los libros, todos los materiales escolares deben ser autorizados previamente por un “especialista”. En caso contrario, los maestros que incumplan la ley podrían enfrentarse a multas de hasta 5.000 dólares o incluso a penas de cárcel de hasta cinco años. Desde que fue aprobada, varias aulas han vaciado sus estanterías, como se puede ver en algunas publicaciones que han compartido padres y profesores en redes sociales.
El gobernador republicano Ron DeSantis se está erigiendo como adalid institucional del neoconservadurismo estadounidense. Esta especie de pin parental que censura determinados títulos en las escuelas se enmarca en una serie de leyes que atentan contra los derechos de las minorías. Unas medidas contra lo que él y los grupos conservadores y ultracatólicos llaman el pensamiento woke (que se podría traducir como 'progre'). DeSantis también propone más restricciones al aborto, ataques a la libertad de prensa o el permiso para llevar armas sin licencias. Aún no ha anunciado su candidatura para las primarias republicanas de 2024, pero es un secreto a voces que podría hacer sombra a Donald Trump.