Ha muerto este lunes a los 92 años el político y filósofo italiano Mario Tronti, exponente del marxismo obrero de los años 60 del siglo pasado y uno de los intelectuales más influyentes de la izquierda en su país.
Nació en Roma en 1931, en cuya Universidad se licenció en Filosofía en 1956, defendiendo una tesis sobre las obras juveniles de Marx. Fue profesor asociado en la Universidad de Siena durante 30 años ininterrumpidamente, hasta 2001, y enseñó Filosofía moral y Filosofía política. Escribió varios libros y fundó varias revistas, todo ello en el marco de su intento de elaborar y presentar un pensamiento marxista que uniera la teoría con la práctica, y planteara el debate sobre la revolución en Italia y en Occidente.
En 1954 se inscribió al Partido Comunista y militó en él durante décadas, pero no ocupó ningún cargo electo con este partido. Se presentó a las elecciones de 1987 al Parlamento y no logró la victoria. Tendría que esperar hasta 1992 para ser elegido senador por el Partido Democrático de la Izquierda (PdS). En 2013 volvió a hacerse con un escaño en el Senado italiano, tras presentarse en las listas del Partido Democratico (PD), el principal de la izquierda en la actualidad.
La secretaria general del PD, Elly Schlein, lo ha definido hoy un “intelectual refinado”, que “contribuyó mucho a la izquierda italiana y europea. Sus reflexiones, siempre recorridas por la duda, sus análisis, nunca banales, y su compromiso político intenso y directo representan un patrimonio que no debe perderse”.
Por su parte, el senador del PD Stefano Vaccari se despidió de Tronti a través de la red social X (Twitter): “Ha sido un gran honor haber sido tu colega en el Senado durante cinco años, aprendiendo de ti sobre política, sobre la izquierda y el partido. Es un gran dolor saber que ya no estarás ahí para enseñarnos”.
Tronti estuvo entre los fundadores de la revista 'Cuadernos Rojos' en los años 50, pero que abandonó en 1963 para fundar otra publicación, 'Clase Obrera', de la que fue director. En 1981 fundó otra importante revista en línea con el Partido Comunista de la época, 'Laboratorio Político'. Él mismo dijo que ese proyecto, en el que participaban varios intelectuales de renombre, buscaba “ofrecer a la izquierda herramientas más refinadas de análisis y de conocimiento de las cosas” y tuvo éxito y cierta repercusión internacional, en sus palabras.
Además, entre 2004 y 2015 fue presidente del Centro para la Reforma del Estado, un centro de estudios e investigación, coincidiendo dos años con su segunda legislatura como senador.
El intelectual decía de sí mismo que era un “revolucionario conservador”, aunque llevaba varios años retirado de los focos mediáticos y de la primera línea de la política. En una entrevista con el periódico La Repubblica, desde un convento en la Toscana en el que se encontraba al cumplir 90 años, declaró: “¿La muerte? La espero con serenidad”.
“He vivido suficientemente, aún así, espero que sea un pasaje llevadero. Usando las palabras del (filósofo Michel de) Montaigne, confío en que me sorprenda mientras cultivo mis hortalizas en el huerto”, afirmó entonces Tronti.