Al menos 180 personas han muerto y 213 han resultado heridas como consecuencia de dos atentados perpetrados este domingo en la capital de Irak, según señalan fuentes policiales consultadas por Efe. El atentado más mortífero se produjo en una zona comercial del centro de Bagdad, mientras que el segundo de los ataques se registró al este de la capital, dejando “cinco muertes y 16 heridos”, según informa la agencia Associated Press, que cita fuentes policiales.
El ataque con mayor número de víctimas ha sido reivindicado por el ISIS en un comunicado. En el escrito, firmado por Wilayat Bagdad (Provincia de Bagdad) y difundido en las redes sociales, el autodenominado Estado Islámico aseguró que el ataque tuvo como blanco “una concentración de renegados”, en alusión a los chiíes.
Un suicida detonó el vehículo que conducía en medio de una multitud congregada frente a una famosa y antigua tienda de helados en la zona comercial de Al Karrada, muy transitada. La calle estaba abarrotada de personas, en un periodo en el que los musulmanes celebran la festividad del Ramadán.
A Al Karrada se dirigió el primer ministro iraquí, Haidar al Abadi, quien afirmó que los terroristas “después de haber sido aplastados en los campos de batalla cometen ataques con explosivos en un intento desesperado”. La población no recibió bien la visita del jefe del Gobierno, a cuyo convoy lanzaron piedras e increparon al grito de “vete”.
Además, una segunda explosión tuvo lugar en otra zona, al este de Bagdad, en el murieron “cinco personas y 16 resultaron heridas”, recoge AP. Este ataque no ha sido reivindicado hasta el momento por ningún grupo.
El ISIS, que cifró en 40 los fallecidos y en 80 los heridos, advirtió de que “con el permiso de Dios proseguirán los ataques de los muyahidines contra los renegados”.
Este ataque del ISIS llega después de que las fuerzas iraquíes declararan la semana pasada que la ciudad de Faluya había quedado “completamente liberada” del grupo yihadista. Los terroristas aún controlan la segunda mayor ciudad del país, Mosul.
Este sábado, el ISIS se adjudicó la autoría de otro atentado, esta vez en Dacca. La capital de Bangladesh sufrió el azote del grupo islamista en un restaurante al que habitualmente asisten extranjeros. En total, fallecieron 28 personas según la información oficial: 20 rehenes, dos policías y seis atacantes.
Condena de España
El Gobierno de España ha condenado el “execrable atentado” ocurrido la pasada madrugada en Bagdad. “España expresa su máxima cercanía y solidaridad con las víctimas y sus familiares, y confía en un pronto restablecimiento de los heridos”, señala el Ejecutivo a través de un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores.
El Gobierno manifiesta además todo su apoyo al pueblo y a las autoridades iraquíes, esperando que los autores del ataque respondan por sus delitos ante las autoridades judiciales cuanto antes. “España reitera su repudio hacia toda forma de violencia terrorista, venga de quien venga y en cualquier lugar en que se produzca”, añade.