La participación en la segunda ronda de las elecciones legislativas francesas ha sido del 35,33 % a las 17.00, tres horas antes del cierre de las mesas, lo que supone un descenso de más de cinco putos frente a la primera vuelta y augura un nuevo récord de abstención.
Los datos de Ministerio del Interior indican que a la misma hora del año pasado, la participación fue del 40,75 %, en una jornada en la que al final votó un 49,71 % del censo, la mayor abstención de la historia del país en unas legislativas.
La cifra de este domingo es también muy inferior a la registrada en las legislativas de hace cinco años, cuando a tres horas del cierre de los colegios en la segunda vuelta había votado el 46,42 % del electorado.
Esos comicios marcaban hasta ahora el récord de abstención total, el 44,60 %.
En 2007, la participación a las 17.00 horas era del 49,58 %, en una jornada en la que la abstención total fue del 40,02 %.
El instituto de sondeo Elabe estimó que la tasa de participación total, conocidos estos datos, puede rondar hoy el 42 %.
La mayoría de las mesas electorales francesas cerrará en una hora, aunque las de las ciudades más grandes lo harán a las 20.00 horas (18.00 GMT).
Francia renueva este domingo 573 de los 577 escaños que componen la Cámara baja, puesto que 4 fueron elegidos ya en la primera vuelta.
Los sondeos auguran una amplia mayoría para el partido del presidente, Emmanuel Macron, que se impuso en las presidenciales del pasado 6 de mayo, lo que le dejaría manos libres para aplicar las reformas que prometió en campaña.
Macron, que votó a primera hora de la mañana en la localidad de Le Touquet, en el noroeste del país, antes de participar en una ceremonia militar de homenaje a los resistentes caídos en la Segunda Guerra Mundial.