El viceministro de Exteriores y Expatriados de Siria, Faysal Mikdad, ha avisado este sábado de que un posible ataque de Estados Unidos no será un “picnic” y que el Gobierno dara una respuesta “firme”.
En un encuentro con la comunidad siria en Italia, Mikdad ha asegurado que Damasco hará frente a cualquier ataque que lance Estados Unidos y que saldrá victorioso, según ha informado la agencia estatal de noticias, SANA.
Además, Mikdad ha resaltado la colaboración prestada por las autoridades sirias a la misión de investigadores de la ONU, que esta semana han analizado el lugar del presunto ataque químico del 21 de agosto, a las afueras de Damasco.
Aparte, el 'número dos' de Exteriores sirio ha arremetido contra Estados Unidos por desoír las advertencias de la ONU contra un ataque militar en Siria y seguir sus intereses. A su juicio, Estados Unidos recae en su “papel destructivo”, como el que, según Mikdad, tuvo en las guerras de Afganistán, Irak y Libia.
Irán advierte: las consecuencias “rebasarán” sus fronteras
Irán ha reafirmado su oposición a cualquier ataque contra Siria y ha advertido de que las consecuencias de una intervención militar estadounidense en el país “rebasarán las fronteras sirias”, según han declarado dos altos cargos gubernamentales iraníes.
El comandante en jefe de la Guardia Revolucionaria iraní, el general Mohamad Alí Jafari, ha ironizado que la hipótesis de que Estados Unidos sea capaz de ejecutar un ataque limitado en Siria es “solo una ilusión” y ha alertado que las consecuencias “rebasarán las fronteras sirias”.
Es más, el general Jafari ha amenazado con desatar “crisis inminentes de seguridad nacional” a quien participe en una eventual intervención militar en Siria, en declaraciones realizadas durante una reunión del Consejo Supremo de Seguridad Nacional recogidas por según la agencia estatal de noticias iraní IRNA.
Asimismo, el comandante en jefe de la Guardia Revolucionaria iraní ha atribuido la política de un ataque “limitado y muy preciso” a los escasos de apoyos granjeados por Estados Unidos, al tiempo que ha enfatizado el intervencionismo de Washington ha espoleado el radicalismo, la violencia y el terrorismo en la región