Una conversación de altos mandos alemanes revela la presencia militar británica “sobre el terreno” en Ucrania

Los soldados británicos están “sobre el terreno” en Ucrania ayudando a las fuerzas de Kiev a disparar los misiles Storm Shadow de largo alcance, según una filtración, a medios rusos, de una llamada ultrasecreta en la que participaron oficiales de las fuerzas aéreas alemanas.

El Kremlin afirmó que la filtración demostraba la implicación directa del Occidente en la guerra de Ucrania, mientras que ex ministros de Defensa británicos expresaron su frustración con los militares alemanes en respuesta a las revelaciones.

Publicada el viernes por la editora del canal de noticias RT, dependiente del Kremlin, Margarita Simonyan, la grabación de audio –confirmada como auténtica por Alemania– capta a oficiales de la Luftwaffe discutiendo cómo podrían utilizarse los misiles Taurus de Berlín para intentar volar el puente de Kerch que conecta Rusia con la Crimea ocupada.

Durante la conversación, el teniente general Ingo Gerhartz, jefe de la Luftwaffe, describe cómo Reino Unido trabaja con Ucrania en el despliegue de misiles Storm Shadow contra objetivos situados hasta 225 kilómetros detrás de las líneas rusas.

“Cuando se trata de planificar misiones”, dice el comandante alemán, “sé cómo lo hacen los ingleses, lo hacen en reachback. También tienen algunas personas sobre el terreno, ellos lo hacen; los franceses, no”.

Reachback es un término militar para describir cómo los servicios de inteligencia, el equipo y el apoyo de la retaguardia se adelantan a las unidades desplegadas en el frente, pero Gerhartz sugiere que el enfoque británico es más profundo, e implica apoyo sobre el terreno.

El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, ha dicho que las conversaciones filtradas “ponen de manifiesto una vez más la implicación directa de la alianza occidental en el conflicto de Ucrania”, aunque el domingo el ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, acusó a Moscú de librar “una guerra de información” contra Occidente.

Sin embargo, no se pone en duda la autenticidad de la conversación de 38 minutos, que tuvo lugar hace 15 días en la relativamente insegura plataforma Webex. Al parecer, fue pirateada y grabada por agentes rusos que se la pasaron al editor de RT para que la publicara en Telegram el viernes.

Tobias Ellwood, ex ministro de Defensa junior del Reino Unido, dijo que la filtración era embarazosa para Berlín, aunque declaró a la BBC que Rusia probablemente sabía de la presencia británica dada la intensidad de sus actividades de espionaje.

Pero eso “no debería impedir que se mantuvieran conversaciones serias en los pasillos diplomáticos entre Alemania y Gran Bretaña y, de hecho, la OTAN, así como sobre por qué ocurrió esto en primer lugar”, añadió Ellwood.

El martes de la semana pasada, Reino Unido confirmó la presencia de un “pequeño número de efectivos” en Ucrania, aunque no precisó qué tareas estaban llevando a cabo, en medio de la preocupación de que cualquier posible participación en combate pudiera ser considerada como una escalada por Moscú.

El canciller alemán, Olaf Scholz, afirmó, por su parte, el pasado lunes, que no proporcionaría misiles Taurus a Ucrania porque ello requeriría la presencia de alemanes para igualar a británicos y franceses y participar en “la forma de control de objetivos y acompañamiento del control de objetivos”.

Con ello, advirtió, se corría el riesgo de convertir a Berlín en un “participante en la guerra”, aunque esos soldados tuvieran su base en Alemania. “Los soldados alemanes no pueden en ningún momento y en ningún lugar estar vinculados a los objetivos que alcanza este sistema [el Taurus]”, añadió.

En la grabación, Gerhartz y otros tres oficiales alemanes discuten la negativa del canciller, y cómo sería posible sortearla, antes de una reunión de 30 minutos que el jefe de las fuerzas aéreas mantiene con el ministro de Defensa, Pistorius. Se quejan de que un periodista alemán, supuestamente próximo a Scholz, ha sido informado de que Taurus no es eficaz.

Llegan a la conclusión de que una entrega rápida y el uso de los misiles en un futuro inmediato sólo serían posibles si participaran soldados alemanes. El entrenamiento de soldados ucranianos en Taurus para evitar poner soldados alemanes en suelo ucraniano era una posibilidad, pero llevaría meses de preparación.

Los misiles Taurus tienen un alcance máximo superior a los Storm Shadow y Scalp, sus equivalentes franceses, de 300 millas. En la llamada, los oficiales alemanes hablan de posibles tipos de objetivos para el Taurus, incluido un “puente en el este” que, según se dice, es difícil de alcanzar con pilares “relativamente pequeños”.

La descripción coincide con el estratégico puente de Kerch, una ruta de suministro clave para la Crimea ocupada por Rusia y que, a pesar de los numerosos intentos de bombardearlo, los ucranianos no han podido destruir hasta ahora. Concluyen que sería técnicamente factible volar el puente, pero podrían necesitarse “entre 10 y 20 misiles”.

Roderich Kiesewetter, experto en defensa de los democristianos, en la oposición, afirmó que Rusia había filtrado la reunión en ese momento para “socavar específicamente una entrega alemana de Taurus”. Sugirió que la filtración se llevó a cabo “para desviar la conversación pública” de otros asuntos, entre ellos la muerte de Alexei Navalni.

Nota del editor:

Tras la publicación del artículo, un portavoz del Gobierno británico ha señalado a elDiario.es: “El Reino Unido siempre ha dejado claro que no tiene previsto desplegar tropas británicas para luchar junto a las Fuerzas Armadas de Ucrania. Nuestro objetivo es entrenar y equipar a las propias fuerzas ucranianas con material de última generación, trabajando en calidad de asesores, para que continúen su lucha contra la invasión rusa”.