Nuevas imágenes de satélite muestran cómo ha ido aumentando el número de tumbas excavadas en un cementerio de la ciudad ucraniana de Mariúpol, ocupada por Rusia, según un informe del Centro de Resiliencia de la Información (CIR, en inglés), con sede en Reino Unido.
Los investigadores del CIR han utilizado imágenes obtenidas por satélite para constatar que entre el 12 de mayo y el 29 de junio se crearon unas 1.400 nuevas tumbas en el cementerio de Starokrymske. Calculan que cada mes se están cavando cinco veces más tumbas que antes de la invasión rusa.
“Nuestro informe evidencia la presión continua y extrema que sufre la población civil en Ucrania, especialmente en las zonas ocupadas. Los entierros improvisados y el creciente número de fosas en el país, especialmente en las zonas ocupadas y sus alrededores, son una cruda muestra del número de muertos civiles tras la invasión rusa”, dice Benjamin Strick, director de investigaciones del CIR.
Rusia anunció a finales de mayo que había tomado el control de Mariúpol, tras un asedio de casi tres meses que dejó gran parte de la ciudad portuaria en ruinas.
3.100 tumbas
El CIR ha utilizado imágenes captadas por Planet Labs PBC, un operador privado de satélite, para estimar que el 12 de mayo el número de tumbas en el cementerio de Starokrymske había aumentado en 1.700 desde el comienzo de la guerra, y que el 29 de junio se habían añadido otras 1.400 tumbas, con lo que el número total excavado desde el inicio de la invasión asciende a 3.100.
Las imágenes muestran que entre el 21 de octubre y el 28 de marzo se cavaron unas 1.000 tumbas. Desde que Rusia se hizo con el control de Mariúpol, la ciudad no ha vuelto a registrar combates, y los cerca de 90.000 ucranianos que permanecen en ella se han quedado sin apenas acceso a electricidad, teléfono, Internet, suministro de agua o atención sanitaria. Según el CIR, el aumento de las fosas en tiempos de calma podría explicarse por los cientos de cadáveres descubiertos bajo los edificios destruidos de la ciudad.
A finales de mayo, Petro Andryushchenko, un alto cargo del Ayuntamiento de Mariúpol que ahora se encuentra fuera de la ciudad controlada por los rusos, dijo que se habían encontrado unos 200 cuerpos en estado de descomposición enterrados en el sótano de un gran edificio.
En total, Andryushchenko ha calculado que 22.000 personas murieron en la ciudad en los dos meses de combates. Una de las personas que coordinan los entierros en la zona declaró previamente a The Guardian que el total podría estar más cerca de los 50.000. La Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas afirma que más de 5.000 civiles han muerto en Ucrania desde que Rusia lanzó su invasión el 24 de febrero. Kiev afirma que la cifra real es mucho mayor.
Se dispone de poca información sobre la situación en Mariúpol, que en gran medida ha quedado aislada del mundo exterior con las limitadas conexiones de telefonía móvil e Internet. Las imágenes publicadas ocasionalmente en el canal de Telegram 'Mariúpol Now', creado por un voluntario ucraniano para difundir información de la ciudad, muestran el traslado de cadáveres para su entierro. En una imagen especialmente espeluznante, que según el canal fue tomada en junio, se ven decenas de cadáveres tendidos en un aparcamiento.
El informe del CIR señala que el elevado índice de víctimas mortales registrado en Mariúpol durante los combates por el control de la ciudad “está en correlación con los movimientos rusos y el incesante bombardeo dentro de una distancia razonable”.
Trincheras en las fosas
En Mangush, una ciudad cercana a Mariúpol, el CIR analizó una fosa de la que las autoridades ucranianas informaron por primera vez el 21 de abril, cuando el Centro de Comunicaciones Estratégicas y Seguridad de la Información de Ucrania anunció que los lugareños habían encontrado una nueva fosa común de 30 metros.
Según el CIR, las imágenes de Planet muestran un aumento de la actividad en el lugar de la fosa entre el 24 de abril y el 8 de mayo. El Centro de Comunicaciones Estratégicas y Seguridad de la Información de Ucrania afirmó que entre 3.000 y 9.000 habitantes de Mariúpol estaban enterrados en la fosa común.
El informe también ha analizado un cementerio en Pionerske, un asentamiento a las afueras de Mariúpol que, según el documento, muestra la creación de trincheras en las fosas que coincidían con las posiciones militares rusas recién formadas.
“En casos como el de Mariúpol, la existencia de múltiples fosas comunes en las cercanías, como la de Pionerske, denota el alto índice de mortalidad que se correlaciona con los movimientos rusos y el incesante bombardeo en una distancia razonable”, asegura el informe, que concluye que, combinado con otras pruebas de fuentes de código abierto, “se desprende una imagen clara de que el Kremlin está llevando a cabo su campaña incumpliendo las convenciones internacionales de derechos humanos”.
Traducción de Emma Reverter.