El Kremlin habla de 'putinfobia' pero su portavoz también aparece implicado en la investigación
Para el Kremlin, las revelaciones de 'Los Papeles de Panamá' son simple 'Putinfobia' y los periodistas que investigan los manejos financieros del presidente de Rusia no han “encontrado nada nuevo”.
Según el portavoz de Putin, Dmitry Peskov, la filtración y publicación de los archivos del bufete panameño Mossack Fonseca se diseñó con el objetivo de “desestabilizar la situación de Rusia de cara a las elecciones”. “Es claro que el nivel de 'Putinfobia' ha llegado a un punto tal que, a priori, es imposible hablar bien de Rusia; se ha convertido en una necesidad hablar mal de este país”, dijo.
El portavoz también negó que su esposa haya sido la titular de una empresa registrada en las Islas Vírgenes Británicas. “Mi esposa no es dueña de una empresa offshore y nunca lo ha sido; basándome en este hecho, me veo obligado a dudar de la autenticidad de las otras afirmaciones”, repitió durante una entrevista en Moscú.
Pero el diario the Guardian tiene en su poder documentos que muestran a la ex patinadora olímpica de patinaje sobre hielo y esposa de Peskov, Tatiana Navka, como la titular de una empresa offshore secreta. Según varios documentos de 'Los Papeles de Panamá', Navka montó la empresa Carina Global Assets Ltd. en 2014. En varios correos electrónicos, los representantes de Navka en la Isla de Man escribieron que la empresa sería usada para hacer inversiones.
Vida de millonarios
Navka y Peskov comenzaron su relación a mediados de 2012, después de que este se separara de su anterior esposa. En 2015, la pareja se casó en Sochi con una ceremonia fastuosa. Fueron el blanco de muchas críticas por, supuestamente, pasar su luna de miel en el Maltese Falcon, el segundo velero más caro del mundo.
Algunos activistas se dieron cuenta entonces de que el reloj de Peskov (suizo, de edición limitada y con una calavera de oro en el centro) valía más de 500.000 euros, casi cuatro veces su salario en el Kremlin. Peskov dijo que era un regalo de su nueva esposa.
Durante una entrevista con los periodistas del Organized Crime and Corruption Reporting Project (OCCRP), Navka negó la semana pasada haber tenido una empresa offshore. “Nunca tuve una empresa o una cuenta bancaria offshore. No sé quién pudo haber dicho eso. Me gustaría entender qué es lo que pasó”.
Sin embargo, entre los archivos filtrados hay una copia del pasaporte ruso de Navka. Además, para poder registrar la empresa, Navka tuvo que proveer el equivalente a seis meses (abril, agosto, septiembre, octubre, noviembre y diciembre de 2013) con facturas de servicios públicos que certificaban su residencia en el domicilio de Moscú. Las facturas tienen el sello del departamento de “Banca privada VIP” del Banco de Moscú.
La empresa de Navka era administrada por Bridgewaters, una empresa británica con sede en la Isla de Man. Según 'Los Papeles de Panamá', dicha empresa tiene entre sus clientes a muchos rusos de alto poder adquisitivo, como el accionista del club de fútbol Arsenal, Alisher Usmanov.
Bridgewaters dejó a dos de sus empleados a disposición de Navka como directores designados, Brett Armitage y Stephen Corran. No hay indicios de que estuvieran involucrados en ningún delito. De esta forma, se agregaba un manto de confidencialidad impenetrable: la titularidad de Navka no aparecería en los registros públicos.
Pero su nombre sale a la luz en los correos electrónicos privados intercambiados entre Mossack Fonseca y Bridgewaters, donde también había una copia de su pasaporte.
El amigo chelista
En febrero de 2014, los agentes de Mossack Fonseca en la Isla de Man pidieron a Bridgewaters más detalles de la nueva empresa de Navka. El representante escribió: “Quería saber si tendrían una actualización de la copia del pasaporte certificado de Tatiana Navka. Además, necesitamos más información sobre las actividades de la empresa. Ustedes dijeron 'inversiones' pero necesitamos saber exactamente el alcance de dichas inversiones”.
Bridgewaters respondió el correo electrónico y dijo que la empresa offshore no necesitaba una licencia especial, según las leyes de las Islas Vírgenes británicas. Y agregó: “Por favor, tenga en cuenta que la empresa hará inversiones en nombre del titular”.
El 20 de febrero de 2014 se registró con éxito la empresa Carina Global Assets Ltd. En octubre de 2015 la empresa estaba en proceso de liquidación. Por ese entonces, el periodismo internacional estaba investigando intensamente los negocios privados del círculo más íntimo de Putin y de su mejor amigo, el chelista Sergei Roldugin.
Peskov dijo ayer que el presidente seguía manteniendo su amistad con Roldugin, vinculado con la pista de préstamos y acuerdos offshore por un valor de 2.000 millones de dólares. Roldugin conoce a Putin desde 1977 y es el padrino de su hija Maria. “Roldugin y otras personas de los más variados sectores siguen siendo amigos de Putin; tiene muchos amigos en Rusia y en el exterior”, dijo Peskov.
El portavoz de Putin agregó que creía que el consorcio periodístico detrás de 'Los Papeles de Panamá' incluía a “varios exfuncionarios del Departamento de Estado así como a empleados de la CIA y de otros servicios de inteligencia”.
“Sabíamos que Putin era corrupto”
Aunque las organizaciones anticorrupción de Rusia alabaron la investigación, incluso algunos opositores liberales desestimaron las acusaciones contra el círculo íntimo de Putin por poco sorprendentes y carentes de interés.
La activista política Alena Popova escribió en Facebook: “Para un público occidental, esto sería una razón válida para que un político presentara la renuncia pero aquí no es una razón válida, para nada… La sociedad se ha acostumbrado tanto a que los políticos puedan robar de nuestros bolsillos que está casi grabado en nuestros genes”.
Alexei Navalny, político opositor y activista anticorrupción, no piensa lo mismo. En su opinión, 'Los Papeles de Panamá' son importantes porque muestran en detalle el funcionamiento de los mecanismos para ocultar el dinero: “Sabíamos que Putin era corrupto así que, por supuesto, hasta cierto punto, esto no cambia la percepción general que teníamos de él. Tal vez por eso algunas personas desestimen este hecho y consideren que no tiene importancia pero nosotros creemos que sirve porque no solo nos da una idea general, sino que nos muestra una cuenta concreta llena de dinero, y permite ver en detalle el esquema de cómo funcionaba y qué empresarios estaban llenando esa cuenta”. Navalny también pidió que sean sometidos a medidas disciplinarias los bancos rusos involucrados que coticen en las bolsas de Europa.
En declaraciones a la agencia Bloomberg, el presidente del VTB (el mayor banco estatal de Rusia) Andrei Kostin dijo que no había nada inherentemente sorprendente en el uso de las empresas offshore. En su opinión, las alegaciones contra Putin eran “una estupidez”.
“Jamás he leído algo que relacionara directamente al señor Putin, el señor Putin nunca estuvo involucrado, y no sé cómo el hecho de que su hija haya celebrado su boda en la estación de esquí de Igora, que en realidad no es tan cara y se utiliza todas las semanas para celebrar bodas para decenas de personas en San Petersburgo, puede relacionar a Putin con cualquier negocio offshore”, dijo Kostin.
El uso de empresas offshore es completamente legal. Sin embargo, el presidente ruso ha hablado en repetidas ocasiones acerca de “desoffshorizar” instando a los rusos a traer de vuelta el dinero escondido en el extranjero. La primera vez que Putin tocó el tema fue en 2011, cuando dijo a los líderes empresariales: “Debemos repatriar nuestros bienes. ¿A qué le tenemos miedo? Debemos mejorar nuestro régimen fiscal”. La reacción del público que lo escuchaba fue una carcajada. Putin también se rio. Pero dijo: “No es gracioso”.
En 2014, Putin firmó un proyecto de ley para hacer que los rusos paguen impuestos sobre sus cuentas offshore y en junio ofreció amnistía fiscal a los que escondían su dinero ilegalmente en cuentas offshore, siempre y cuando se gravara o se repatriara.
Según los medios de comunicación del Estado ruso, gracias a los mecanismos para expatriar fondos a paraísos fiscales, en los últimos años desaparecieron de Rusia unos dos billones de dólares.
Traducción de Francisco de Zárate