La marcha de las tropas rusas destapa el horror en Bucha

Daniel Boffey / Martin Farrer

Kiev —
3 de abril de 2022 16:51 h

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La retirada del ejército ruso en los alrededores de Kiev ha dejado pruebas espeluznantes de las atrocidades cometidas contra la población civil en los suburbios y ciudades de la provincia, convertidos en zonas de guerra infernales tras la invasión de Vladímir Putin.

Las fotografías de la ciudad muestran una escena de devastación. Cuando las columnas de blindados ucranianos entraron en Bucha, una ciudad situada al noroeste de la capital, encontraron las calles bloqueadas por tanques y vehículos militares rusos quemados, y sembradas de cadáveres de civiles que, según los habitantes, fueron asesinados por las fuerzas invasoras sin provocación alguna.

Periodistas de Agence France-Presse (AFP) han visto al menos 20 cadáveres, todos vestidos de civil, que yacían en una sola calle de Bucha. También se encontró el cuerpo de un fotógrafo ucraniano desaparecido, Maksim Levin, en una localidad cercana.

Según AFP, tres de ellos estaban todavía cerca de sus bicicletas, después de haber dado su último paseo, mientras que otros habían caído junto a coches acribillados y aplastados.

Los periodistas que han accedido a esta localidad devastada han explicado que uno de ellos tenía las manos atadas a la espalda con un paño blanco y que su pasaporte ucraniano había quedado abierto junto a su cadáver.

“Todas estas personas han sido fusiladas”, ha declarado a la AFP el alcalde de Bucha, Anatoly Fedoruk, que ha añadido que otros 280 cadáveres han sido enterrados en fosas comunes en la ciudad. “Estas son las consecuencias de la ocupación rusa”.

Los soldados ucranianos en Bucha, que fueron recibidos efusivamente por los residentes de la ciudad, ataron cables a los cuerpos y los sacaron de la calle por temor a que fueran trampas explosivas. Los soldados también limpiaron las barricadas e inspeccionaron los objetos sospechosos, colocando trapos rojos sobre los restos de munición sin explotar para llamar la atención sobre la posibilidad de explosiones.

Mientras se liberaba la ciudad, Halyna Tovkach, una mujer de 55 años, explicó a The Guardian que estaba buscando el cuerpo de su marido, Oleg, de 62 años. Fue asesinado por soldados rusos junto con sus vecinos, dos niños pequeños y su madre, cuando intentaban escapar de la ciudad el 5 de marzo. “Es un crimen de guerra”, señaló el hijo de Tovkach.

Entre los civiles asesinados por los rusos se encuentra también Olha Sukhenko, alcaldesa del pueblo de Motyzhin, al este de Kiev, y toda su familia.

Este no es el único caso por el que se acusa a Rusia de haber cometido crímenes de guerra. El ejército ruso habría utilizado a niños como “escudos humanos” mientras se replegaba.

El fiscal general de Ucrania está recopilando un expediente de denuncias sobre el uso por parte de Rusia de niños de la zona para evitar el fuego cuando se repliegan en los alrededores de la capital ucraniana y en otros lugares. Se afirma que se han colocado autocares de niños delante de los tanques en el pueblo de Novyi Bykiv, cerca de la ciudad cercada de Chernihiv, a 160 kilómetros al norte de Kiev.

La ministra de Asuntos Exteriores británica, Liz Truss, se ha mostrado “consternada por las atrocidades cometidas en Bucha y otros pueblos de Ucrania”.

“Los informes de que las fuerzas rusas atacan a civiles inocentes producen rechazo. El Reino Unido colabora en la tarea conjunta de recabar pruebas y apoyar la investigación de crímenes de guerra del Tribunal Penal Internacional. Los responsables tendrán que rendir cuentas”, tuiteó Truss a última hora del sábado.

Ucrania y sus aliados occidentales afirman que cada día que pasa son más las pruebas de que Rusia está replegando a su ejército de los alrededores de Kiev y, en cambio, desplegando soldados en el este de Ucrania. Este evidente cambio de estrategia no se traduce en que el país vaya a poder tener un respiro, tras más de cinco semanas de guerra o que los más de 4 millones de refugiados que han huido de Ucrania vayan a regresar pronto.

El Donbás y el sur de Ucrania como objetivos

El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha vuelto a reiterar su advertencia de que el ejército ruso quiere tomar el Donbás y el sur de Ucrania. En su discurso nocturno por vídeo del sábado, Zelenski afirmó que “somos conscientes de que el enemigo tiene reservas para aumentar la presión en el este”. No obstante, prometió combatir a los rusos en el Donbás y en su retirada de la región de Kiev.

“Estamos reforzando nuestras defensas en el este del país y en el Donbás”, afirmó Zelenski. “¿Cuál es el objetivo de las tropas rusas? Quieren capturar tanto el Donbás como el sur de Ucrania”.

Pero Zelenski se quejó de que la “arquitectura de seguridad global ha fracasado” y de que Ucrania “aún no ha recibido suficientes sistemas antimisiles occidentales modernos” de sus aliados occidentales, ni ha recibido aviones. Y añadió: “Cada misil ruso que golpea nuestras ciudades, y cada bomba lanzada sobre nuestro pueblo, sobre nuestros hijos, sólo hace que crezca la mancha negra de la historia que describa a todos aquellos de los que dependía la decisión”.

El domingo por la mañana, algunas fuentes informaron de una cadena de explosiones en la ciudad portuaria de Odesa, en el sur del país.

“Odesa ha sido atacada desde el aire. Algunos misiles han sido derribados por la defensa aérea”, indicó el ayuntamiento en un breve comunicado emitido a través de la app Telegram. Dijo que se reportaron incendios en algunas áreas, pero no proporcionó detalles sobre el blanco del ataque.

Según AFP, el mediador ucraniano, David Arakhamia, que participa en las conversaciones encaminadas a encontrar una solución pacífica entre las partes, habría dicho que Rusia acepta “verbalmente” la posición ucraniana en las conversaciones de paz, excepto en la cuestión de Crimea. Moscú también habría aceptado que un referéndum sobre el estatus neutral de Ucrania “será la única salida a esta situación”.

Arakhamia también dijo a los canales de televisión ucranianos que de celebrarse un encuentro entre Zelenski y el presidente ruso, Vladimir Putin, éste tendría lugar “ con mucha probabilidad” en Turquía.

Por otra parte, en una entrevista publicada el domingo, el viceprimer ministro polaco ha acusado a Francia y Alemania de tener una relación demasiado estrecha con Rusia. También ha condenado el comportamiento de Berlín hacia Moscú antes de la invasión de Ucrania.

“Alemania, al igual que Francia, tiene un fuerte sesgo a favor de Moscú”, ha afirmado JarosÅ‚aw KaczyÅ„ski, que también es líder del partido gobernante Ley y Justicia (PiS), en una entrevista al diario alemán Die Welt.

KaczyÅ„ski ha reservado sus palabras más duras para Berlín, diciendo que durante años el gobierno alemán prefirió ignorar lo que Rusia estaba haciendo bajo el liderazgo de Putin “y hoy vemos el resultado”. Asimismo, ha añadido que “Polonia no está satisfecha con el papel de Alemania en Europa”.

410 civiles muertos en los suburbios de la capital

La Fiscalía general de Ucrania ha cifrado este domingo en 410 el número de cadáveres de civiles recuperados hasta ahora en los suburbios del norte de Kiev tras la retirada de las tropas rusas. “410 cuerpos de civiles asesinados han sido sacados hasta ahora del territorio de la región de Kiev,” anunció la fiscal general Iryna Venediktova en una publicación de Facebook, según recoge la agencia Ukrinform.

“Los fiscales y otros especialistas han examinado por el momento 140 de ellos,” ha agregado, explicando que los investigadores están cooperando con la población local en busca de testigos, víctimas y pruebas gráficas como fotos o vídeos. “La gente está asustada, cansada y atormentada, han experimentado el horror,” ha descrito Venediktova, precisando que hará falta “tiempo y un enfoque profesional” para documentarlo todo de forma correcta y no perder la oportunidad de castigar a los responsables.

Traducido por Emma Reverter.

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