No fue sólo una mala noche para los eurófilos y David Cameron, sino también para las compañías de encuestas, que no supieron leer las intenciones del electorado antes del referéndum. De las 168 encuestas hechas sobre la consulta desde que se eligió la pregunta en septiembre, menos de un tercio (55) pudieron adelantar el voto favorable a la salida de la UE.
El resultado definitivo tuvo un 51,9% por la salida y un 48,1% por la permanencia. Sólo 16 de las 168 encuestas predijeron un 52/48 en favor de la salida.
Los sondeos sí apreciaron un cambio de tendencia en favor del Brexit en las primeras semanas de junio, pero volvieron a inclinarse por la permanencia en los últimos días anteriores al voto. Sólo dos de las seis encuestas difundidas el día anterior al referéndum, las realizadas por TNS y Opinium, dieron ventaja al Brexit.
La primera y última de las encuestas que predijeron el resultado correcto fueron hechas por Survation, que concedió un 52% a la salida y un 48% a la permanencia tanto el 4 de septiembre como el 15 de junio. La empresa varió las posiciones en los días posteriores; el sondeo del 20 de junio dio a la permanencia un 51%.
Las empresas de encuestas recibieron muchas críticas tras fracasar en su pronóstico de las elecciones generales de mayo de 2015. En esa ocasión, tanto los sondeos como las casas de apuestas no anunciaron la victoria conservadora por mayoría absoluta, aunque la diferencia fue menor en el caso de las apuestas.
Justo antes del referéndum escocés de independencia en 2014, varios encuestadores anunciaron la victoria del sí, aunque la mayoría acertó al pronosticar que Escocia se quedaría en Reino Unido.
Antes del referéndum de la UE, hubo 14 ocasiones entre el 17 de noviembre y el 17 de junio donde las encuestas predijeron un empate entre ambos bandos (en todos esos caso, los indecisos no eran contabilizados en los cálculos).
El estudio What UK Thinks, basado en una media entre seis encuestas en cada momento, revela que los sondeos estuvieron más cerca del resultado correcto a mediados de junio, cuando esa media daba a la salida de la UE entre el 51% y el 53%.
Las casas de apuestas también se equivocaron con el referéndum de la UE. Las apuestas estaban en un 1/4 la semana pasada, lo que indicaba una probabilidad del 80% sobre la victoria del campo proUE.