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El hijo de la periodista de los Papeles de Panamá asesinada acusa a los “criminales” de Malta

Jon Henley /Juliette Garside

El hijo de la periodista y bloguera maltesa asesinada Daphne Caruana Galizia ha relatado cómo corrió desesperadamente hacia el coche en llamas en el que murió su madre y cargó contra la “cultura de impunidad” de la isla y los “criminales” que la manejan.

“Mi madre fue asesinada porque se plantó entre el estado de derecho y aquellos que quieren violarlo, igual que muchos otros periodistas valientes”, escribió Matthew Caruana Galizia en una publicación de Facebook conmovedora y por momentos muy gráfica.

“Pero también la mataron porque fue la única persona que investigó. Esto sucede cuando las instituciones del Estado son inútiles: la última que queda en pie es una periodista. Y eso la convierte en la primera persona a la que quieren matar”. 

Daphne Caruana Galizia, que dirigió la investigación sobre la corrupción de los Papeles de Panamá en Malta -–en la que también trabajó su hijo, que también es periodista de investigación–, fue asesinada el lunes pasado, cuando su coche explotó a causa de una bomba tan fuerte que encontraron piezas del coche en un campo cercano.

El lunes por la noche, miles de personas se reunieron en una vigilia con velas espontánea en Sliema, cerca de Valetta, la capital de la isla, para llorar a la periodista que describían como “la mujer Wikileaks”. El blog de la periodista era muy crítico con los políticos de la isla y con las bandas de crimen organizado.

Había denunciado que recibía amenazas

Matthew Caruana Galizia dijo que nunca va a olvidar cómo “corrió por el infierno que era el campo, tratando de encontrar una forma de abrir la puerta del coche mientras seguía sonando el claxon. Les grité a dos policías que estaban por allí y vinieron a apagar el fuego con un solo extintor”.

El joven relató que uno de los policías le dijo: “Lo siento, pero ya no podemos hacer nada”. “Miré y vi partes del cuerpo de mi madre tirados a mi alrededor. Me di cuenta de que tenían razón, ya no se podía hacer nada. '¿Quién iba en el coche?', me preguntaron. 'Mi madre. Y ahora está muerta. Muerta por culpa de vuestra incompetencia”.

Caruana Galizia, de 53 años, tenía un blog muy popular en el que difundía casos de presunta corrupción de alto nivel en el mundo político de Malta. “Hay criminales por donde mires. La situación es desesperante,” escribió la periodista en una publicación que subió tan sólo media hora antes de que explotara la bomba en su coche.

Los testigos le dijeron a la policía que la periodista acababa de salir de su casa e iba por una calle cerca del pueblo de Bidnija, al norte de Malta, cuando explotó la bomba. Los medios de comunicación locales afirman que hacía dos semanas la periodista había denunciado ante la policía que estaba recibiendo amenazas.

Múltiples casos de corrupción

La investigación más reciente de Caruana Galizia apuntaba al primer ministro de Malta, Joseph Muscat, y a dos de sus colaboradores más cercanos, vinculándolos con empresas offshore y una mafia que vendía pasaportes malteses y recibía dinero del gobierno de Azerbaiyán.

Muscat repudió el asesinato de la periodista, llamándolo un “ataque feroz a la libertad de prensa”, y anunció que el FBI estadounidense había aceptado enviar un equipo de expertos para ayudar a los investigadores locales. “No descansaré hasta que se haga justicia por este caso”, aseguró Muscat.

“Todos saben que Caruana Galizia me criticaba duramente, tanto a nivel personal como político, pero nada puede justificar este acto barbárico de ninguna forma”, añadió el primer ministro, que denunció a la periodista y ganó unas elecciones convocadas con prisa el pasado junio para lograr un voto de confianza ante las acusaciones de la periodista.

Si bien los principales objetivos de Caruana Galizia eran políticos del partido gobernante, el Laborista, también había publicado recientemente investigaciones sobre la oposición maltesa, cuyo líder –Adrian Delia– dijo que la periodista fue víctima de un “crimen político” y pidió una investigación independiente.

“No aceptaremos una investigación bajo el mando de la policía, ni del ejército, ni de ningún juez, ya que todos ellos eran centro de las críticas de Caruana Galizia,” afirmó Delia. “Lo que sucedió hoy no es un asesinato común. Es la consecuencia del colapso total del estado de derecho, algo que viene sucediendo desde hace cuatro años.”

Las investigaciones de Caruana Galizia apuntaban tanto a políticos supuestamente corruptos, como a bancos que les facilitan el lavado de dinero, o los vínculos entre la industria de juego online de Malta y la mafia. Su trabajo reciente se enfocaba en las revelaciones de los llamados Papeles de Panamá, una serie de documentos filtrados por el despacho de abogados panameño Mossack Fonseca.

Varios políticos europeos han expresado su conmoción y consternación por la muerte de la periodista. “Un día negro para la democracia”, tuiteó Manfred Weber, una diputada conservadora del Parlamento Europeo. Frans Timmermans, vicepresidente de la comisión europea, que había recibido una carta de un miembro maltés del Parlamento Europeo en la que se quejaba de la “intimidación” de los periodistas en Malta, tuiteó que estaba “conmocionado y escandalizado”. “Si silencian a los periodistas, habremos perdido nuestra libertad.”

Un ataque a la libertad de prensa

Matthew Caruana Galizia afirmó en su publicación de Facebook que el asesinato de su madre “no es un asesinato común y no tiene nada de trágico. Trágico es que te atropelle un autobús. Cuando estás rodeado de sangre y fuego, es una guerra. Somos un pueblo en guerra contra el Estado y el crimen organizado, que se han vuelto indistinguibles”. 

El joven criticó “al payaso del primer ministro”, que hace declaraciones al Parlamento “sobre una periodista que se pasó una década demonizando y acosando”, y remarcó una publicación de Facebook de un sargento de policía que, poco después de la muerte de la periodista, escribió: “¡Todos recibimos nuestro merecido, cerda asquerosa! Me siento feliz :)”

Caruana Galizia concluyó: “Sí, a esto hemos llegado: un estado mafioso…en el que te ponen una bomba por ejercer tus libertades básicas, y luego aquellos que te deberían haber protegido, lo celebran”.

El periodista afirmó que en la isla se ha generado una “cultura de impunidad” después de que el primer ministro “llenó su oficina de criminales, luego llenó la policía de criminales e imbéciles, y luego llenó los tribunales de criminales e incompetentes”.

“Si las instituciones hubieran funcionado, no habría habido asesinato que investigar, y mis hermanos y yo hoy tendríamos a nuestra madre”. 

Tras un pedido de recusación presentado por la familia de la periodista asesinada, la jueza a cargo de la investigación, Consuelo Scerri Herrera, que había sido criticada por Caruana Galizia en su blog y luego la denunció, se retiró del caso este martes.

Traducido por Lucia Balducci