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Polémica en Canadá por un homenaje en el Parlamento a un veterano ucraniano de una unidad nazi durante la visita de Zelenski

Peter Beaumont y Leyland Cecco

Toronto —
25 de septiembre de 2023 19:38 h

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En Canadá ha aumentado la polémica política después de que los miembros de la Cámara de los Comunes fueran animados a sumarse a una ovación en honor a un veterano que luchó en Ucrania, durante la Segunda Guerra Mundial, con una unidad militar nazi acusada de crímenes de guerra.

La ovación tuvo lugar poco después de que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, pronunciara un discurso en el Parlamento el pasado viernes. Su presidente, Anthony Rota, fue quien llamó la atención de los legisladores sobre la presencia de Yaroslav Hunka, de 98 años, a quien describió como un “héroe de guerra” que luchó en la Primera División Ucraniana.

Imágenes del propio Parlamento mostraron a Zelenski y al primer ministro canadiense, Justin Trudeau, de pie y aplaudiendo a Hunka, unas escenas que han sido condenadas por grupos judíos. Mientras los legisladores aplaudían, Zelenski levantó el puño en señal de reconocimiento y Hunka saludó desde la tribuna a lo largo de dos ovaciones distintas.

El Kremlin calificó este lunes el incidente de “indignante” y las cuentas prorrusas en las redes sociales se hicieron rápidamente eco de las fotografías de Zelenski.

Una división nazi señalada

Los críticos han señalado que la Primera División Ucraniana era más conocida como la División “Galicia” de las Waffen-SS o la 14ª División Waffen de las SS, una unidad de voluntarios que estaba bajo el mando de los nazis.

La decisión de permitir a unos 600 miembros de esa división residir en Canadá después de la Segunda Guerra Mundial ha sido durante mucho tiempo una fuente de controversia en este país y fue objeto de una comisión gubernamental de investigación en la década de 1980, en la que se planteó si Canadá se había convertido en un refugio para criminales de guerra.

Miembros de esa división han sido acusados de matar a ciudadanos polacos judíos. En los juicios de Nuremberg, las Waffen-SS fue reconocida como una organización de crímenes de guerra, pero no la división Galicia en concreto.

Durante el fin de semana, Rota emitió un comunicado en el que pedía disculpas por lo ocurrido: “En mi intervención tras el discurso del presidente de Ucrania, reconocí a una persona en la tribuna. Posteriormente tuve conocimiento de más información [sobre esa persona] que hace que me arrepienta de mi decisión”, dijo en el texto.

Añadió que los demás parlamentarios y la delegación ucraniana desconocían su plan de reconocer a Hunka en el Hemiciclo. Rota también señaló que Hunka era de su distrito. “Quiero presentar mis más sinceras disculpas a las comunidades judías de Canadá y de todo el mundo. Asumo toda la responsabilidad de mi acción”, afirmó.

No fue posible contactar con Hunka para que hiciera declaraciones. En una publicación en redes sociales de su nuera, se le puede ver “esperando en el salón de recepciones a Trudeau y Zelenski”, según dijo ella.

Por su parte, el Centro para Israel y Asuntos Judíos, un grupo judío canadiense, dijo que estaba “profundamente preocupado” por el hecho de que se hubiera reconocido a un veterano de una división nazi que participó en el genocidio de judíos. Los Amigos del Centro Simon Wiesenthal de Estudios sobre el Holocausto emitieron un comunicado el domingo en la que afirmaban que la división “fue responsable del asesinato en masa de civiles inocentes con un nivel de brutalidad y malicia inimaginable”.

Y añadía: “Se debe una disculpa a todos los supervivientes del Holocausto y veteranos de la Segunda Guerra Mundial que lucharon contra los nazis, y debe explicarse cómo este individuo entró en los salones sagrados del Parlamento canadiense y recibió el reconocimiento del presidente de la Cámara y una ovación en pie”.

Grupos judíos llevan tiempo haciendo campaña contra dos monumentos conmemorativos que hay en Canadá, relacionados con ucranianos que lucharon en el bando alemán. El líder conservador de la oposición canadiense, Pierre Poilievre, también ha pedido a Trudeau que se disculpe.

La oficina de Trudeau ha dicho que Rota se había disculpado y había aceptado toda la responsabilidad por haber cursado la invitación a Hunka y por el reconocimiento en el Parlamento. “Era lo que había que hacer”, ha afirmado. “No se avisó con antelación a la oficina del Primer Ministro ni a la delegación ucraniana sobre la invitación o el reconocimiento” a Hunka.

La polémica de los voluntarios ucranianos

Dominique Arel, catedrático de Estudios Ucranianos de la Universidad de Ottawa, declaró a la cadena pública canadiense CBC que la división de la que formaba parte Hunka había atraído a miles de voluntarios ucranianos, muchos de los cuales se alistaron con la esperanza de conseguir la independencia de Ucrania. Sólo los alemanes de Alemania podían luchar en el Ejército de ese país, explicó Arel, por lo que los voluntarios no alemanes que creían en los objetivos nazis o buscaban lograr sus fines a través del poder nazi fueron organizados en divisiones de las SS.

“Aquí tenemos la cuestión del simbolismo, la óptica de servir en una unidad militar cuyo logotipo es el de la que posiblemente fuera la mayor organización criminal del siglo XX... así que obviamente la óptica no es buena”.

Zelenski se encontraba en Ottawa para reforzar el apoyo de los aliados occidentales a Ucrania contra la invasión rusa. Vladimir Putin ha calificado a sus enemigos en Ucrania de “neonazis”, a pesar de que Zelenski es judío y perdió familiares en el Holocausto.

La polémica también plantea cuestiones incómodas en torno a la conmemoración de destacadas figuras ucranianas que lucharon junto a las fuerzas nazis durante la guerra. En su discurso ante los legisladores canadienses, Zelenski señaló que la ciudad de Edmonton fue la primera en conmemorar a las víctimas del Holodomor, la hambruna masiva impuesta por la URSS a los ucranianos, millones de los cuales murieron a principios de la década de 1930. La ciudad erigió un monumento en 1983 en memoria del 50 aniversario de la hambruna.

Pero dentro de la ciudad hay otros dos monumentos conmemorativos -uno de ellos financiado parcialmente por los contribuyentes- que han sido objeto de un mayor escrutinio en los últimos años. En el Complejo de la Unidad de la Juventud Ucraniana, un busto representa a Roman Shukhevych, conocido colaborador nazi vinculado a masacres de civiles polacos. Una segunda estatua dedicada a la división “Galicia” de las Waffen-SS se encuentra en un cementerio de Edmonton.

En julio de 2020, fue escrito con spray “monumento de guerra nazi” sobre un cenotafio que conmemora a los soldados de la división “Galicia” en un cementerio de Ontario.

En 1985, el entonces primer ministro de Canadá, Brian Mulroney, creó la comisión de investigación sobre criminales de guerra en Canadá después de que un diputado afirmara que el médico nazi Josef Mengele podría haberse refugiado en el país.

En concreto, sobre la cuestión de la división “Galicia”, el jefe de esa comisión de investigación, Jules Deschênes, dictaminó que los miembros “no deben ser inculpados como grupo”.

“Los miembros de la división Galicia fueron examinados individualmente por motivos de seguridad antes de su admisión en Canadá. Las acusaciones de crímenes de guerra contra la división Galicia nunca han sido corroboradas, ni en 1950, cuando se presentaron por primera vez, ni en 1984, cuando se renovaron, ni ante esta comisión”.

Traducido por Francesca Cicardi.