Con las encuestas favorables y a seis meses de las elecciones, parece que Donald Trump ya está tanteando a los miembros de su futuro gabinete si vuelve a ser elegido presidente. Entre los nombres que baraja el republicano está el de Elon Musk, a quien ha planteado la posibilidad de trabajar para él como asesor, según ha revelado en exclusiva The Wall Street Journal.
A pesar de que el posible rol que ocuparía Musk aún no está del todo definido (y puede que incluso no llegué a pasar), según The Wall Street Journal se trataría de un cargo que tendría influencia sobre las políticas relacionas con la seguridad de la frontera y la economía. Dos temas muy sensibles en estas elecciones.
El tanteo de Musk como posible asesor tuvo lugar en pasado mes de marzo en Palm Beach, dentro de la mansión del Montsorrel, propiedad del multimillonario Nelson Peltz. El periódico estadounidense explica que durante una reunión informal con diversos amigos ricos, Trump, Peltz y Musk hablaron sobre las elecciones del 5 de noviembre y criticaron a la administración Biden.
En estas conversaciones con el expresidente, Musk y el multimillonario Peltz también propusieron a Trump invertir en un plan para prevenir el fraude electoral. Otra gran cuestión que forma parte de la agenda republicana, donde el expresidente sigue insistiendo en que la victoria de Joe Biden en 2020 fue un fraude. De hecho, Musk ha salido en defensa de los procesados por el asalto al Capitolio del 6 de enero y también ha compartido teorías conspiranoicas que aseguran que fue un montaje.
El interés de Trump por Musk no es casual: el empresario sudafricano se ha erigido como paladín del avance de la derecha y azote de la ideología woke (progresista) en internet. Algo que hizo notar muy claramente cuando compró Twitter (ahora X) y aseguró que permitiría la “libertad de expresión” dando barra libre a la circulación de bulos y fakenews. De hecho, cuando adquirió X, el fundador de Tesla volvió a readmitir a Donald Trump dentro de la plataforma. Para otros muchos líderes conservadores, como es el caso del presidente argentino, Javier Milei, Musk se ha convertido en todo un referente.
Reuniones de millonarios contra Biden
Dentro de esta campaña para acabar con la corriente “woke”, The Wall Street Journal asegura que Musk y Peltz también están organizando reuniones con otros empresarios y miembros de la élite de todo el país para convencerles de que no apoyen a la campaña del presidente Biden.
Actualmente, Trump y Musk tienen una muy buena relación y, según The Wall Street Jorunal, hablan por teléfono varias veces al mes a medida que se acercan las elecciones. Aunque no siempre ha sido así: hace apenas dos años llegaron a insultarse públicamente. De hecho, al inicio de la campaña de las primarias republicanas, Musk mostró una mayor simpatía por el gobernador de Florida, Ron DeSantis, a quien le prestó la red social X para el lanzamiento de su campaña.
Durante la anterior presidencia de Trump, Musk ya había participado en algunas reuniones de grupos de asesores empresariales en la Casa Blanca. La colaboración solo duro hasta el 2017, cuando Musk se retiró como protesta por la decisión de Trump de sacar a Estados Unidos del acuerdo climático de País.
En su acercamiento al expresidente, Musk también ha aprovechado para hablar sobre sus negocios, en especial Tesla. Estos últimos meses la compañía que fabrica coches eléctricos ha visto caer los precios de sus acciones y ha registrado sus beneficios más bajos en años. A pesar de la buena sintonía política respecto a otros temas, Trump siempre se ha mostrado contrario a uno de los principales negocios del magnate sudafricano. Ahora bien, según el periódico estadounidense, ambos empresarios habían hablado sobre los créditos fiscales para los coches eléctricos.