El Elíseo anunciaba un “acuerdo en principio” para una nueva reunión entre Biden y Putin. Pero el Kremlin se ha apresurado este lunes a calificar el anuncio de “prematuro”. La cumbre entre los presidentes de EEUU Rusia para hablar de Ucrania fue comunicada por la presidencia después de varias gestiones diplomáticas realizadas por el Emmanuel Macron este domingo. EEUU, por su parte, sí parecía haber aceptado la reunión, supeditada a que no se haya producido un ataque de Rusia sobre Ucrania.
El portavoz de Vladimir Putin, Dmitri Peskov, ha dicho que Putin y Biden podrían reunirse si lo consideran necesario, pero ha destacado, según la agencia rusa Tass, que “es prematuro hablar sobre planes específicos para una cumbre” y que no había planes concretos, y habló sobre el Donbás: “La situación es extremadamente tensa y hasta ahora no vemos signos de una disminución en el nivel de tensión. Las provocaciones y los bombardeos son cada vez más intensos, por supuesto, lo que genera una preocupación muy profunda”.
Sobre el Donbás también ha hablado el presidente ruso, Vladímir Putin, quien ha dicho que estudiará la petición de reconocimiento que le han hecho las repúblicas autoproclamadas del este de Ucrania de Donetsk y Lugansk: “Vamos a decidir nuestros futuros pasos en esa dirección, teniendo en cuenta también la solicitud de los dirigentes de las repúblicas autoproclamadas de Donetsk y Lugansk para el reconocimiento de su soberanía y la petición de la Duma rusa (Cámara Baja) sobre el mismo tema”.
Sobre este asunto, el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, afirmó la semana pasada tras la votación de la Duma que sería una “violación flagrante de los acuerdos de Minsk”. Pero no habló de desencadenar sanciones de la UE.
En efecto, haría saltar los acuerdos de Minsk, con los que se identificaba hasta ahora Rusia, y que establecían un alto el fuego en el Donbás que, según Rusia, Ucrania viola sistemáticamente. En este sentido, Rusia ha asegurado este lunes que ha matado a cinco miembros de un supuesto grupo de sabotaje y reconocimiento de Ucrania que habría entrado en territorio ruso, algo que fuentes oficiales ucranias. “Cinco violadores de la frontera rusa de un grupo de sabotaje y reconocimiento fueron eliminados en un enfrentamiento armado”, afirmó el Distrito Militar Sur, según la agencia rusa Interfax citada por Efe.
Mientras, los ministros de Exteriores de la UE han ampliado este lunes a cinco personas más las sanciones por la organización de las elecciones de septiembre en Crimea, anexionada por Rusia en 2014.
Francia también ratificaba en su comunicado el anuncio del viernes de Joe Biden sobre una reunión entre los jefes de la diplomacia estadounidense y rusa, Anthony Blinken y Sergéi Lavrov este próximo jueves “en Europa”. Rusia ha terminado por confirmar esta cita este lunes, pero a diferencia de la cumbre. Y es posible que esa reunión de alto nivel entre Vladímir Putin y Joe Biden sea algo que deban terminar de rematar Blinken y Lavrov. De fondo seguirán presentes las principales reivindicaciones rusas: una garantía de que la OTAN frene su expansión al Este –Ucrania y Georgia– y se lleve los misiles de países de la OTAN que antes lo fueron del Pacto de Varsovia.
En este sentido Putin ha asegurado: “El colega estadounidense [Biden] aseguró que Ucrania no va a ser aceptada [en la OTAN] mañana; es más, algún tipo de moratoria es posible. De acuerdo con Putin, ”ellos [los aliados] creen que Ucrania no está preparada ahora mismo. Por ello creemos que esto (la no incorporación de Ucrania en la OTAN) no es una concesión a nosotros“, sino el propio plan de la Alianza, ”una moratoria para los aliados mismos“, informa Efe.
Cumbre en el aire
“El presidente de la República [Emmanuel Macron] ha conversado con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el presidente de la Federación Rusa, Vladímir Putin”, decía el comunicado difundido por el Elíseo: “Ha propuesto que se celebre una cumbre entre el presidente Biden y el presidente Putin, y luego con los actores relevantes para discutir la seguridad y la estabilidad estratégica en Europa. Los presidentes Biden y Putin han aceptado en principio. El contenido deberá ser preparado por el secretario [de Estado] Blinken y el ministro [de Exteriores] Lavrov durante su reunión del jueves 24 de febrero. Solo puede celebrarse con la condición de que Rusia no invada Ucrania. El presidente de la República trabajará con todas las partes interesadas para preparar el contenido de estas discusiones”.
“¿Una cumbre?”, decía el jefe de la diplomacia europea este lunes a la entrada del Consejo de ministros de Exteriores en Bruselas: “Sí, deben movilizarse tantas herramientas diplomáticas como uno pueda imaginar. Se necesitan con urgencia cumbres, reuniones a nivel de ministros, a nivel de líderes, sea cual sea el formato, sea cual sea la forma de hablar y sentarse a la mesa y tratar de evitar la guerra. Apoyaremos cualquier cosa que pueda hacer que las conversaciones diplomáticas sean la mejor manera, el único camino para buscar una solución a la crisis”.
En relación con las sanciones, Borrell ha afirmado: “El trabajo está hecho. Estamos listos”.
El mecanismo para las sanciones, insiste la UE, consiste en esperar a que se produzca verdaderamente un ataque y, en función de qué ataque sea, tomar una decisión por parte de los 27 a propuesta del Alto Representante para la Cooperación y Desarrollo de la UE, Josep Borrell.
El ministro de Exteriores de España, José Manuel Albares, ha dicho, por su parte, en Bruselas: “La posibilidad de esa cumbre [entre Biden y Putin] es una muy buena noticia. Desde el inicio lo hemos dicho. España lo que quiere privilegiar es la vía diplomática y el diálogo. No hay nada que no podamos dialogar y hablar con Rusia, pero para eso necesitamos que el diálogo sea sereno. Una vez más pedimos [a Moscú] una retirada de esa cantidad de tropas [en la frontera con Ucrania] completamente injustificada por motivos defensivos”.
Así mismo, el ministro de Exteriores ucranio, Dmytro Kuleba, que participa en la reunión de los ministros de Exteriores de la UE, ha anunciado a la entrada que pedirá que se aprueben ya sanciones contra Rusia: “Creemos que hay buenas y legítimas razones para imponer al menos algunas de las sanciones a Rusia para demostrar que la UE no solo habla por hablar sobre las sanciones, sino que avanza. Esperamos decisiones. Hay muchas decisiones que la UE puede adoptar ahora para enviar mensajes claros a Rusia de que su escalada no se tolerará y de que no se abandonará a Ucrania a su suerte”.