Medio centenar de mujeres, niños y ancianos consiguieron salir este viernes de la asediada Mariúpol tras semanas refugiados en la fábrica siderúrgica de Azovstal, donde resisten las últimas fuerzas ucranianas. La ONU y la Cruz Roja supervisaron el convoy humanitario que ahora se dirige a la segura ciudad de Zaporiyia, bajo control del Ejército local.