El rublo, la divisa rusa, ha perdido el 62,1 % de su valor desde que el pasado 24 de febrero Rusia invadiera Ucrania, y después de que Occidente haya aislado al país financieramente.
En la jornada de este lunes, la moneda rusa alcanza un nuevo mínimo histórico. Se deprecia hasta los 132 rublos por dólares, y hasta los 144 rublos por euros.
La nueva depreciación de la divisa se produce después de que EE. UU. haya anunciado que está teniendo conversaciones “muy activas” con la Unión Europea para prohibir la importación de petróleo procedente de Rusia, en un nuevo intento por asfixiar a la economía rusa en represalia por la guerra en Ucrania.
Asimismo, la agencia de calificación Moody's ha degradado la nota de la solvencia soberana del Gobierno de Rusia, que ya estaba dentro del “bono basura”, de “B3” a “Ca”, por la expectativa de que los controles de capital del Banco Central de Rusia restrinjan los pagos transfronterizos, incluido el servicio de la deuda de los bonos del Gobierno.
Informa Efe.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha compartido un nuevo vídeo a través de su canal de Telegram oficial para demostrar que sigue en Kiev. “No me escondo. Y no le tengo miedo a nadie”, ha añadido.
Zelenski ha dicho en un mensaje que acompaña al vídeo que se pretende quedar en la calle Bankova de Kiev, el equivalente al Downing Street en Londres, “tanto tiempo como sea necesario para ganar esta guerra”.
En el vídeo nocturno, que comienza con un plano que muestra por la ventana el barrio gubernamental, Zelenski ha afirmado que todo su equipo permanece allí: “Todos estamos aquí, todos estamos trabajando. Todos están donde deben estar. Yo estoy en Kiev, mi equipo me acompaña”, ha insistido.
Ha recordado que el acuerdo sobre corredores humanitarios para evacuar a la población civil se frustró por tercer día consecutivo: “¿Funcionó? En cambio, los tanques rusos sí funcionaron”. El presidente de Ucrania ha asegurado que las fuerzas rusas “incluso minaron el camino” por el que debía producirse la evacuación frustrada de la población civil de Mariúpol, en el sur del país, y que los militares de Rusia llegaron a destruir “los autobuses que se supone que deben sacar a la gente”.
También ha sostenido que continuarán las negociaciones con Rusia para detener la guerra tras la tercera ronda celebrada el lunes en territorio bielorruso. “Me gustaría decir que fue la tercera y última, pero somos realistas. Por lo tanto, hablaremos. Insistiremos en las negociaciones hasta encontrar la forma de decirle a nuestro pueblo y al mundo: así llegaremos a la paz”.
No es la primera vez que el dirigente ucraniano comparte vídeos para demostrar que no ha abandonado el país.
Los Estados miembros de la Unión Europea han dispuesto 10.000 camas de hospital hasta la fecha para las personas que huyen de la guerra en Ucrania, según ha informado este lunes la comisaria europea de Salud, Stella Kyriakides.
“Garantizaremos el traslado seguro de los pacientes que necesiten atención médica específica a los hospitales de toda la UE”, ha dicho en su cuenta oficial en Twitter. Hasta ahora, añadió, “los Estados miembros han puesto a disposición 10.000 camas de hospital”.
Kyriakides hizo esas declaraciones durante una visita este lunes a Polonia, donde visitó un centro de acogida de refugiados que le resultó “desgarradora”. “La visita al centro de acogida de refugiados en Polonia hoy ha sido desgarradora. Familias que huyen de sus hogares sin tener a dónde ir por culpa de una guerra sin sentido”, ha lamentado. Pero también, dijo, “ha sido conmovedor ver la acogida: los polacos abriendo sus corazones y sus hogares a los refugiados”.
Las camas de hospital están destinadas a permitir el traslado de niños enfermos, pacientes con cáncer, pacientes quemados o necesitados de cuidados intensivos que han llegado a la UE.
Con información de EFE.
El jefe de la delegación rusa, Vladímir Medinski, ha expresado su decepción con los resultados de la tercera ronda de conversaciones con Ucrania: “Nuestras expectativas en las negociaciones no se han cumplido, pero esperamos que la próxima ocasión podamos dar pasos más significativos”.
Medinski ha dicho que “las negociaciones continuarán”, en unas declaraciones recogidas por la agencia rusa Tass, así como que llegaron a la reunión con “un gran número de documentos” que esperaban que firmara la delegación ucraniana, pero esta “se llevó los documentos para estudiarlos en Kiev y no se firmó nada en el acto”.
El delegado ruso también ha expresado su “esperanza” en que los corredores humanitarios, que por ahora han fracasado, comiencen a funcionar este martes. También el asesor presidencial ucraniano Myjailo Podoliak ha hablado de “pequeños avances” en la mejora logística de los corredores humanitarios.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha verificado 16 ataques contra la atención sanitaria en Ucrania durante la invasión rusa, según ha explicado en Twitter. Estos ataques tuvieron lugar entre el 24 de febrero y el 3 de marzo.
La agencia de Naciones Unidas –que ha condenado en los últimos días estos ataques contra instalaciones sanitarias, personal y pacientes–, está verificando actualmente más incidentes denunciados.
Por Icíar Gutiérrez.
El director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, ha pedido que se acuerde un marco para la seguridad tecnológica y física de las centrales nucleares de Ucrania y se ha referido a la toma de la planta de Zaporiyia, la mayor de Europa.
Durante la noche del jueves pasado, las tropas rusas atacaron la central ucraniana y causaron un incendio que duró horas. Grossi ha dicho este lunes que “las fuerzas rusas controlan ahora la gestión de la central y la aprobación de las decisiones técnicas tomadas por los operadores ucranianos”.
“Esta no es una forma segura de gestionar una central nuclear. Tampoco es seguro ni sostenible que se hayan interrumpido y cortado las comunicaciones internas y externas, como nos han informado el operador y el regulador ucranianos. Estoy profundamente preocupado por este giro de los acontecimientos”, ha indicado el director de la OIEA.
Ha señalado que, viendo lo que ocurre en Ucrania, “si hay un accidente nuclear, la causa no será un tsunami provocado por la madre naturaleza. En cambio, será el resultado de la falta de acción humana cuando sabíamos que podíamos y sabíamos que debíamos”.
Informa Icíar Gutiérrez.
La Asociación Europea de Universidades (EUA, en inglés) ha expulsado a 12 centros rusos después de que estos publicaran el pasado viernes un comunicado apoyando la invasión de Ucrania. “Ante nuestros ojos se desarrollan eventos que emocionan a todos los ciudadanos rusos. Esta es la decisión de Rusia de finalmente acabar con ocho años de enfrentamientos entre Ucrania y el Donbás, conseguir la desmilitarización y desnazificación de Ucrania y por tanto protegerse de las crecientes amenazas militares”, escriben los rectores en su carta, que utiliza las mismas palabras que Putin para justificar la invasión.
“Es muy importante estos días apoyar a nuestro país, a nuestro ejército, que defiende nuestra seguridad, apoyar a nuestro presidente quien, quizás, tomó la más difícil pero necesaria decisión de su vida”, añaden, y acaban con un “¡Juntos somos una gran fuerza!”.
La nota está firmada por casi 200 rectores de universidades y otros académicos, entre ellos Sadovnichiy Victor Antonovich, presidente de la Unión Rusa de Rectores y máximo dirigente de la Universidad Estatal de Moscú M. V. Lomonosov.
Escribe Daniel Sánchez Caballero.
Ha terminado la tercera ronda de negociaciones entre Ucrania y Rusia en la región conocida como Belovezhskaya Pushcha, en la frontera entre Polonia y Rusia.
Así lo ha confirmado a través de su cuenta de Twitter el Asesor del Jefe de la Oficina Presidencial de Zelenski, Mijaíl Podoliak, quien ha indicado que tras las conversaciones hay “pequeños avances” en la mejora de los corredores humanitarios.
El conglomerado LetterOne, fundado por el sancionado empresario ruso Mikhail Fridman, ha decidido apartar de su consejo de administración a otros tres empresarios rusos socios del magnate. Al mismo tiempo, ha realizado una donación de 150 millones de dólares (138 millones de euros), según ha informado el grupo en un comunicado.
La firma ha indicado que German Khan, Alexey Kuzmichev y Andrei Kosogov han dimitido de todos sus cargos en LetterOne, incluyendo sus posiciones en el consejo. “Ninguna de estas tres personas ha sido sancionada, pero consideran que es lo correcto para los intereses, a largo plazo, de LetterOne, de sus empleados y de los muchos puestos de trabajo asociados a sus empresas”, ha asegurado el conglomerado radicado en Luxemburgo.
“Esto significa que los accionistas de LetterOne han acordado no beneficiarse de las actividades comerciales de LetterOne y dejarán de tener cualquier participación en el día a día”, ha asegurado el grupo. Previamente, Mikhail Fridman y Petr Aven habían aceptado congelar de forma indefinida sus participaciones, de forma que no pudieran recibir dividendos ni otros beneficios financieros de LetterOne.
“Mis socios y yo defendemos el fin de la guerra lo antes posible y haremos todo lo posible para ayudar a los afectados, ya sean empleados de nuestras empresas en Ucrania o víctimas de la violencia. Apoyamos plenamente las acciones de la junta directiva”, ha explicado German Khan.
Informa elDiario.es.
Amnistía Internacional (AI) ha recordado este lunes a Ucrania y a Rusia que deben respetar los derechos de los prisioneros de guerra de la invasión rusa en virtud del derecho internacional humanitario.
La ONG indica que en los últimos días, las autoridades ucranianas “han llevado a los prisioneros de guerra rusos a ruedas de prensa para hablar de su papel en la invasión militar”, y en las redes sociales también han aparecido vídeos “de soldados capturados poniéndose en contacto con familiares” en Rusia. Asimismo, han aparecido en las redes sociales vídeos de soldados ucranianos capturados, “aunque todavía no está claro si tienen autorización oficial”, dice la entidad.
“A medida que el conflicto continúa, es esencial que todas las partes del conflicto respeten plenamente los derechos de los prisioneros de guerra”, dice Joanne Mariner, directora del Programa de Respuesta a las Crisis de AI en un comunicado. “Cualquier aparición pública puede poner en peligro a los prisioneros de guerra cuando sean devueltos a su país de origen, y también puede resultar problemática para sus familias mientras estén detenidos”.
Mariner recuerda que el artículo 13 del Tercer Convenio de Ginebra establece explícitamente que los prisioneros de guerra deben ser protegidos en todo momento, especialmente de la curiosidad pública. “Es obligación de la potencia que los detiene garantizar que se respetan debidamente los derechos de estos prisioneros desde el momento de su captura”.
Escribe Icíar Gutiérrez.
Las autoridades de Leópolis, al oeste de Ucrania, han dicho que la ciudad ha llegado al límite de su capacidad para ayudar a las personas desplazadas por la invasión rusa.
Según ha indicado el alcalde Andriy Sadovyi en una nota publicada por el ayuntamiento, Leópolis se ha convertido en un refugio para 200.000 personas que se trasladaron a la ciudad para escapar de los bombardeos y los ataques con misiles.
“A día de hoy, hemos utilizado 440 de nuestras instituciones educativas y culturales para acoger a estas personas. También conseguimos que 85 organizaciones religiosas cedieran sus instalaciones para que pudiéramos dar calor y protección a la gente. Las personas que se alojan con nosotros reciben comidas calientes y los recursos necesarios, y satisfacemos plenamente sus necesidades de alimentación y alojamiento. Y esto es una enorme presión sobre la ciudad de Leópolis, y hoy estamos en el límite de nuestras capacidades”, dice.
El alcalde ha pedido ayuda a las organizaciones internacionales. “Necesitamos su apoyo, necesitamos su participación directa aquí en Leópolis. Somos conscientes de la ayuda que hay en las regiones fronterizas o en el territorio de los países vecinos de nuestro país, pero la ayuda es necesaria aquí”.
Por Icíar Gutiérrez.