¿Qué sabemos de la variante sudafricana de la COVID-19?
La variante detectada en primer lugar en Sudáfrica, igual que la nueva variante identificada en Reino Unido, incluye una mutación conocida como N501Y que se cree que hace al virus más contagioso. La apodada variante sudafricana también incorpora otras mutaciones preocupantes, como la E484K y la K417N. Se cree que estas dos mutaciones explican por qué la variante sudafricana parece más capaz de evadir la reacción de los anticuerpos del organismo.
Los últimos ensayos con la vacuna de Novavax para la COVID-19 confirman esta preocupación: la eficacia de esta vacuna contra el coronavirus original fue del 95,6%, mientras que para la variante del Reino Unido fue de un 85,6% y para la sudafricana, de solo un 60%.
Los expertos aseguran que por el momento no parece que provoque síntomas diferentes o una evolución más grave de la enfermedad.
Por otro lado, la gran esperanza de los tratamientos farmacológicos contra la COVID-19, los anticuerpos monoclonales, están fallando contra variantes del virus como las identificadas en Sudáfrica y Brasil, según han comprobado estudios científicos y ha revelado The Guardian. Estos fármacos, basados en clones sintéticos de los anticuerpos neutralizantes naturales contra el coronavirus, habían generado grandes expectativas. Al menos dos de los tres tratamientos más prometedores fallan contra la sudafricana.
¿Hay otras variantes que se pueden escapar a las vacunas?
La variante de Reino Unido que ha empujado los contagios este invierno ha desarrollado mutaciones que la asemejan a la sudafricana y que por lo tanto podrían infectar a personas que ya hayan pasado la enfermedad o que hayan sido inmunizadas con una vacuna, según anunció este martes la Sanidad pública británica. Todavía se han detectado pocos casos de esta nueva mutación (11 en Bristol y 32 en Liverpool) y los expertos creen que las vacunas existentes seguirán ofreciendo protección, aunque sea menor respecto a la que otorgan frente a las variantes conocidas hasta ahora. Varias farmacéuticas ya están trabajando en posibles actualizaciones de sus vacunas para adaptarlas a las nuevas variantes. La obsesión del Gobierno británico es, en cualquier caso, limitar ahora la expansión esta última versión detectada.
¿Cuánto se ha extendido y cómo se detecta la variante sudafricana?
El pasado 28 de enero, el Servizo Galego de Saúde detectó el primer caso confirmado de la variante sudafricana de coronavirus. Se trata de un varón que ya fue dado de alta y no requirió ingreso hospitalario. Fuentes de la Consellería de Sanidade han explicado que la variante sudafricana fue detectada en un hombre de 30 años, vinculado a la industria del naval y que había viajado a Sudáfrica por motivos laborales.
Este miércoles el secretario de Salud Pública de Catalunya, José Maria Argimon, ha anunciado que se ha detectado el primer caso en Catalunya de la variante sudafricana del coronavirus. Se trata de una persona de Barcelona que al parecer no tiene ninguna relación con el país africano.
Unos días antes de conocerse el primer caso en España, el 24 de enero, el secretario de Salud de Reino Unido, Matt Hancock, anunció que se habían detectado 77 casos de la variante sudafricana en el Reino Unido y que estaban vinculados con personas que llegaron al país desde el extranjero. El lunes se anunciaron 105 casos.
Pero la Sanidad Pública de Inglaterra ha comunicado que los casos ya no se limitan a personas llegadas recientemente al país, ya que se han detectado casos de personas que no han viajado a Sudáfrica ni han tenido contacto con personas que hayan estado allí. Reino Unido confirma que ya hay transmisión comunitaria de la variante sudafricana en ocho zonas diferentes de Inglaterra.
Debido a las mutaciones particulares que contiene, la variante británica (conocida como B117) puede identificarse con la prueba de PCR. Pero este procedimiento no sirve para distinguir la variante sudafricana, llamada 501Y.V2. Su detección necesita la secuenciación genética que en Reino Unido realiza el consorcio Cog-UK.
Esta entidad está analizando entre el 5% y el 10% de las muestras de personas que dieron positivo por la COVID-19. Eso quiere decir que no se están detectando todos los casos de la variante sudafricana, aunque se está trabajando para mejorarlo.
“Las cifras que contabilizamos son sólo las que hemos secuenciado, por lo que no representan la cantidad que hay”, dice la profesora Sharon Peacock, directora de Cog-UK. Su equipo está secuenciando entre 15.000 y 20.000 genomas a la semana.
Desde que empezó, Cog-UK ha secuenciado algo más de 232.000 genomas de coronavirus. De ahí se puede deducir, como una estimación aproximada, que menos del 0,05% de los casos en el Reino Unido han sido de la variante sudafricana.
¿Dónde más la han encontrado?
Hasta la fecha, la variante sudafricana se ha encontrado en más de 30 países, como Austria, Bélgica, Kenia, Emiratos Árabes Unidos y Japón. En algunos de esos países, como Bélgica, se han detectado casos de transmisión comunitaria. Es posible que la variante sudafricana, y otras variantes preocupantes, se hayan extendido a otros países con una vigilancia menos estricta y que simplemente no las hayan detectado.
¿Era inevitable el contagio comunitario?
Según Peacock, el control de cualquier variante nueva y preocupante requiere un estricto cumplimiento de las normas de confinamiento, así como el lavado de manos y el mantenimiento de la distancia física para evitar contagios. También dice que habría que considerar meticulosamente la posibilidad de controles fronterizos, incluida la imposición de cuarentenas.
Con una prohibición de viajar y una cuarentena estricta, se reduce en gran medida la posibilidad de que una nueva variante del extranjero se propague de forma comunitaria. Pero una vez que la variante ha entrado, las cosas cambian.
“Sabemos que es probable que esta variante también sea más contagiosa y hemos visto cómo la B117 británica se contagió rápidamente en el Reino Unido, por lo que es probable que esta variante [sudafricana] también se transmita de forma comunitaria”, dice el profesor de la Universidad de Leicester, Kamlesh Khunti, integrante del grupo asesor científico del Gobierno británico para emergencias y del comité Independent Sage.
Los viajes al Reino Unido están ahora prohibidos para las personas que hayan estado hace poco en algunos países, Sudáfrica entre ellos. Los que regresen de viajes a esos países tendrán que pasar pronto la cuarentena en los hoteles.
Algunos dicen que la medida llega demasiado tarde. Según Gabriel Scally, profesor visitante de Salud Pública en la Universidad de Bristol y miembro del comité Independent Sage, es “gravemente irresponsable” que las nuevas medidas de cuarentena del Gobierno no estén ya en marcha y que no se hayan aplicado a todos los que llegan al Reino Unido.
España anunció este martes que limitará aún más los vuelos procedentes de Brasil y Sudáfrica para contener la expansión de las nuevas variantes del coronavirus: desde este miércoles solo podrán volar a España desde esos países ciudadanos y residentes españoles y andorranos o pasajeros que hagan escala inferior a 24 horas, y sin abandonar la zona de tránsito del aeropuerto, con destino a otros países fuera del espacio Schengen
Traducido por Francisco de Zárate