Las autoridades venezolanas han detenido a dos ciudadanos estadounidenses que trabajaron supuestamente con un veterano del Ejército de EEUU que lidera una empresa de seguridad, Silvercorp USA, y que ha reivindicado la autoría de la incursión marítima fallida lanzada desde Colombia para derrocar a Nicolás Maduro, según informó el presidente el lunes.
Los ataques marítimos que el Gobierno de Venezuela frustró en los últimos días han avivado de nuevo el fuego del conflicto político en este país, donde se había apagado hace semanas tras la larga cuarentena a la que obligó el coronavirus.
El Gobierno de Nicolás Maduro, en el poder desde 2013, reveló nuevos detalles de la fallida incursión, por la que responsabiliza al sector de la oposición que se agrupa bajo la figura de Juan Guaidó y a los Gobiernos de Estados Unidos y Colombia.
“Guaidó firmó un contrato para la invasión de Venezuela”, dijo a través de la televisión pública el vicepresidente de Comunicaciones, Jorge Rodríguez, al presentar un audio en el que se escucha la voz de un hombre, que aseguró era Guaidó, pactar con Silvercorp.
“Es tal el nivel de barbarie, de estulticia, de estupidez, que contrata a unos asesinos norteamericanos. Aquí está todo el contrato”, añadió el funcionario mostrando una copia de un documento.
Según Rodríguez, Guaidó, que es reconocido como presidente interino por medio centenar de países, negoció con la contratista militar estadounidense SilverCorp la organización de una expedición que tendría como fin derrocar a Maduro, así como a varias figuras de su Gobierno.
El contrato entre SilverCorp y Guaidó también habría sido firmado por el diputado Sergio Vergara, un cercano colaborador del líder opositor, y por J.J. Rendón, un reconocido asesor en comunicaciones de la región, tal y como alega el Gobierno de Maduro.
La primera incursión, que se intentó a través de las playas del estado costero de La Guaira, considerado por años el balneario favorito de los caraqueños, se saldó con 8 muertos y dos detenidos. Posteriormente, en una segunda incursión marítima a través del céntrico estado Aragua fueron detenidas 13 personas más, entre ellos los estadounidenses Airan Berry y Luke Denman, a quienes el Gobierno venezolano califica como “mercenarios”.
Guaidó, señalado
El Gobierno venezolano ha dicho que los atacantes capturados en ambas incursiones fallidas están siendo interrogados y han entregado información sensible sobre planes para desestabilizar la nación petrolera y forzar un cambio violento de Gobierno. “Hay pruebas testimoniales”, dijo Rodríguez. “Le es imposible a Juan Guaidó sustraerse de ellas”, añadió. La Fiscalía venezolana ha anunciado que ha abierto una investigación, sin ofrecer mayores detalles.
Guaidó no respondió de forma directa a estas acusaciones, aunque sí acusó al Gobierno de Maduro de haber infiltrado el grupo de atacantes y aguardar hasta tener la oportunidad para “masacrarlos”.
“Estaban esperándolos para masacrarlos (...) sabían de esto y los esperaron para masacrarlos. Nicolás Maduro, tú eres el responsable, sabían de esa operación, los infiltraron y los esperaron para masacrarlos”, dijo Guaidó durante una sesión telemática del Parlamento venezolano.
Asimismo, señaló que con la denuncia de la incursión, la llamada revolución bolivariana busca “invisibilizar” otros problemas del país, como las fallas eléctricas que se registran a diario, la escasez de gasolina en todo el país o el motín carcelario del viernes pasado en el noroeste de Venezuela, en el que murieron unos 50 reos.
Trump se desmarca del ataque
Entretanto, el presidente estadounidense, Donald Trump, dijo este mismo martes que su Administración no tiene “nada que ver” con el ataque marítimo, siguiendo así los pasos de Colombia, que ya rechazó por “infundadas y especulativas” las acusaciones de Venezuela.
“Acabo de recibir información. No tiene nada que ver con nuestro Gobierno pero acabo de recibir información sobre eso y lo investigaremos. Estamos preocupados sobre eso, pero sea lo que sea, les informaremos pero no tiene nada que ver con nuestro Gobierno”, afirmó el mandatario en declaraciones a la prensa en la Casa Blanca.
Esa fue la primera declaración pública de Trump sobre el caso, que involucra a los dos estadounidenses que, Venezuela asegura, fueron en el pasado asesores de seguridad del gobernante estadounidense.
Venezuela y Estados Unidos, aliados hasta finales de la década de 1990, mantienen tensas relaciones prácticamente desde la llegada del chavismo al poder, en 1999. Los conflictos entre ambas naciones se agudizaron a principios del año pasado, cuando Estados Unidos fue el primer país del mundo en reconocer a Guaidó como presidente interino.