Iba a ser una reunión del PP europeo previa a la cumbre europea sin mucha expectación. Pero, en pocas horas, los comentarios sobre Vladímir Putin y Volodímir Zelenski de Silvio Berlusconi, líder de Forza Italia, partido miembro del PPE, han llenado de tensión una reunión que parecía de trámite.
Hasta tal punto es así, que el número dos de Berlusconi, Antonio Tajani, ha volado de urgencia a Bruselas para dar explicaciones a su familia política: “Estoy en Bruselas para confirmar otra vez la posición de Forza Italia, y su líder, Silvio Berlusconi, y la mía personal, en favor de la OTAN, las relaciones transatlánticas, de Europa y contra la inaceptable invasión de Ucrania por parte de Rusia”.
Según fuentes conocedoras de los debates, Tajani ha insistido a sus colegas a puerta cerrada en que Forza Italia ha votado por Ucrania tanto en el Parlamento italiano como en el Europeo para apoyar a Kiev, y que el nuevo Gobierno italiano comandado por la postfascista Giorgia Meloni tendrá una “posición clara” sobre la OTAN y Ucrania.
“Si soy miembro del nuevo gobierno, trabajaré en la línea del PPE”, afirman las fuentes que ha dicho Tajani, quien también ha explicado que Berlusconi ha mencionado este jueves en el Corriere della Sera que él es pro Ucrania y que el problema con Putin es de ámbito personal, queriendo desvincularlo del ámbito político.
Dentro de la sala, el presidente del PP español, Alberto Núñez Feijóo, ha reivindicado, según las fuentes, “la responsabilidad histórica del PP europeo”, y ha señalado que “socialistas y populistas” están arrinconando al PP. Así, las fuentes indican que Feijóo reclamó que “los valores del PPE han salvado a la Unión de sus momentos más duros”, y pidió “luchar contra el esfuerzo de los socialistas por reescribir la historia”.
La publicación de nuevos audios este miércoles de una reunión que el magnate y tres veces primer ministro mantuvo el martes con los diputados electos de su partidos incrementan las dudas sobre ese papel de “garante” de Forza Italia en un Gobierno a tracción de la ultraderecha, informa Mariangela Paone.
“Entró en Ucrania y se topó con una situación imprevista e impredecible de resistencia ucraniana, que al tercer día comenzó a recibir dinero y armas de Occidente. Y la guerra, en vez de ser una operación de dos semanas, devino en una de 200 años”, se oye decir a Berlusconi en una grabación del encuentro en la que culpa al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, de haber provocado la invasión rusa de Ucrania al “triplicar” los ataques en el Donbás.
En los audios, el líder de FI vuelve a decir –como ya había hecho en vísperas de las elecciones para luego desmentirse a sí mismo– que el objetivo de Moscú era llegar a Kiev en una semana, “quitar al Gobierno, Zelenski, etcétera y poner otro ya elegido por la minoría ucraniana de personas de bien y de sentido común”.
En una primera filtración de su discurso ante los diputados forzistas, publicada este martes, Berlusconi admitía ya que había “retomado un poco” las relaciones con el presidente Putin. “Por mi cumpleaños me ha mandado 20 botellas de vodka y una carta amabilísima. Le he respondido con botellas de Lambrusco y una carta igualmente amable”, confesaba Berlusconi añadiendo que él es para el líder ruso el “primero de sus cinco verdaderos amigos”.
Tusk pide explicaciones
El expresidente del PP Europeo y del Consejo Europeo, el polaco Donald Tusk, pedía explicaciones este jueves a su llegada a la reunión de la familia popular europea en Bruselas: “Los comentarios de Berlusconi necesitan aclaración, sus vínculos con Rusia plantean un problema para toda la familia del partido”. Sobre el nuevo gobierno italiano, de alianza con la extrema derecha, ha dicho: “No es mi tipo de políticas y espero no estar solo así aquí en el PPE”.