El presidente del Partido de la Izquierda Europea (PIE), Walter Baier, considera que la victoria de Donald Trump es “terrible”. “Los resultados en las elecciones de Estados Unidos son peligrosos para Europa. Son peligrosos y malos para el planeta y el clima y afectarán negativamente a la clase trabajadora, no sólo en ese país sino globalmente”, ha señalado en un encuentro con periodistas.
Para el político austríaco, la vuelta de Trump a la Casa Blanca “enfatizala la necesidad de emancipar a Europa de la tutela de Estados Unidos y de la OTAN”. “Europa debe ocuparse de su propia seguridad. Para tener seguridad necesitamos paz en Europa”, ha agregado el líder del PIE, que considera que en ese camino es “una mala idea” entrar en la carrera armamentística. Además, ha denunciado el “doble rasero” de la UE en su respuesta a la guerra en Ucrania y en el “genocidio” en Gaza.
Baier se ha pronunciado así en el marco del foro que el partido europeo celebra este fin de semana en Budapest. La organización ha elegido la Hungría del ultraderechista Viktor Orbán para el evento como un gesto de apoyo al Partido de los Trabajadores en un país en el que la oposición lo tiene complicado. También como reacción a la “debilidad estratégica” que la izquierda europea tiene en los países del este, según ha explicado el dirigente comunista.
En Hungría, donde los precios de la vivienda se han incrementado un 156% en la última década, Baier se ha pronunciado sobre la crisis que atraviesa a toda Europa y que es una de las prioridades que se ha marcado el partido en esta legislatura. Como diagnóstico, ha asegurado que el fallo es abordar la vivienda como “una mercancía” y no como un “derecho”.
“Toda persona tiene derecho a una vivienda asequible y decente. Punto. Y los Estados, las comunidades y los municipios tienen que ocuparse de ello proporcionando inversiones suficientes, garantizando préstamos baratos para las personas que quieren comprar pisos y ahora se ven atrapadas durante décadas de sus vidas con el pago de los préstamos”, ha explicado Baier, que ha puesto el ejemplo del funcionamiento del modelo en Viena.
Pero también considera que se pueden hacer cosas a nivel europeo y ha reclamado a la Comisión Europea que impulse una directiva que obligue a los estados miembros a poner un tope a los precios del alquiler. “Podría crear un fondo europeo para la vivienda pública en el que concediera préstamos baratos a los municipios. Todo depende de la voluntad política y del dinero que se esté dispuesto a gastar”, ha advertido Baier, que ha comparado esa voluntad con el compromiso de gastar un 2% del PIB en defensa.
Además de la vivienda, Baier ha asegurado que la otra “prioridad” es “contribuir a la creación de un movimiento pacifista amplio y pluralista en Europa” en un momento en el que al PIE -del que forma parte Izquierda Unida- le ha salido competencia con la creación de la Alianza Europea de Izquierdas por los pueblos y el planeta (ELA, por sus siglas en inglés), del que forma parte Podemos. Los dos partidos conviven, eso sí, en el grupo de La Izquierda en el Parlamento Europeo.