Avance Life is Strange, una apuesta diferente de los creadores de Remember Me

Está claro que Remember Me no será recordado como el juego más aclamado de la pasada generación. De hecho muchos lo consideran un título ‘tapado’, uno de esos títulos que pasaron sin hacer demasiado ruido por nuestras veteranas consolas pese a contar con una base bastante ambiciosa. Es por ello que también habrá ciertos usuarios, seguramente los menos, que lo recordarán con cariño tras haber sabido valorar su llamativa historia y esa genial ambientación futurista de la que hace gala.

El caso es que sus responsables, el estudio parisino DontNod Entertainment, ya avisaron días antes de la Gamescom de que se traían algo entre manos. Finalmente terminaron por confirmar de la mano de Square Enix este Life is Strange del que hoy os hablamos. Un título que tiene poco o nada que ver con su anterior trabajo más allá del gusto de jugar con el tiempo, y que de hecho podría asemejarse más con propuestas tan originales como Heavy Rain, salvando las distancias en cuanto al controvertido sistema de control del juego de David Cage.

Así es, porque Life is Strange busca desmarcarse dejando atrás los tiroteos, las persecuciones peliculeras y la testosterona rancia tan de moda hoy en día para apostar por una narrativa madura y algo más realista, mecánicas típicas de una aventura gráfica y una joven protagonista con la habilidad de retroceder en el tiempo. Todo ello con un lanzamiento en PC, PS3, PS4, Xbox 360 y Xbox One en un momento aún por determinar del año que viene.

La importancia de las decisiones.

La trama nos situará en la piel de Max Caufield, una estudiante de instituto que decide volver a su pueblo, la ficticia localidad de Arcadia Bay en Oregon, después de haber pasado cinco años fuera. Pero por desgracia para ella no todo es paz y felices reencuentros, ya que nada más llegar se enterará de que Rachel, una amiga de Chloe, la chica que hasta su partida era su mejor amiga, ha desaparecido en extrañas circunstancias. Nadie sabe nada de ella, y está claro que algo turbio se esconde en su desaparición.

La jugabilidad es pausada, y consiste básicamente en interactuar con el entorno y los diferentes personajes para ganar pistas que nos lleven hasta Rachel. Así pues será fundamental explorar de forma concienzuda cada escenario y no poner traba alguna a la curiosidad. Ya os lo advertimos, no esperéis tiroteos, combates a muerte cuerpo a cuerpo o el lanzamiento de granadas y cócteles molotov, porque aquí lo que habrá que hacer es tirar de cabeza para hilar todo lo que sepamos y resolver así pequeños rompecabezas.

Estando dividido en cuatro episodios de unas dos horas cada uno que irán saliendo a la venta en formato digital con un margen máximo de distancia de un mes entre uno y otro, nuestro objetivo principal será recorrer su trama con cierta libertad. Nos explicamos: cada cual podrá escribir su propia historia gracias a la capacidad de Max de retroceder en el tiempo y a que las decisiones y acciones que realicemos podrán alterar el devenir de los acontecimientos. De esta forma nos veremos inmersos en un auténtico batiburrillo de misterios y relaciones personales que debemos ir despejando y afinando de la mejor forma que sepamos.

Por supuesto no siempre tendremos el tiempo que deseamos para tomar ciertas decisiones, siendo crucial actuar rápido cuando el tiempo se agota. Por ejemplo de no actuar seremos testigos de una escena completamente distinta, aunque determinada no por la última decisión en sí, si no por un montón de ellas por pequeñas que sean tomadas previamente. De esta forma se consigue un elemento de imprevisibilidad más que llamativo. Y lo dicho, será habitual que nos veamos forzados a elegir entre más de dos o tres opciones, por lo que se espera un gran abanico de posibilidades que fomentará una alta rejugabilidad.

Y si alguna de las acciones o decisiones que hemos tomado nos parecen catastróficas, no tenemos más que usar el poder de Max para viajar en el tiempo para poder rectificar esa última acción. Así pues siempre estará en nuestra mano intervenir o no cuando el padrastro de Chloe nos pille en su casa, o elegir en qué momento hacerlo, al igual que podremos ver como un pequeño acto como dejar caer un objeto enturbia nuestra relación con la chica o bien ‘rebobinar’ para no herir sus sentimientos. Eso sí, no por volver atrás y rectificar significa que vayamos a ser testigos a continuación de una escena más agradable. Se espera que eso sea bastante difícil de predecir.

En definitiva, Life is Strange se da a conocer como una propuesta diferente, más orientada hacia la aclamada saga The Walking Dead de Telltale Games que hacia lo visto en Remember Me. Desde el punto de vista técnico queda claro que tampoco es que vaya a ser un portento, entre otras cosas porque estamos ante un juego desarrollado por un equipo que ha ‘adelgazado’ bastante desde su anterior trabajo, y porque dejarnos visualmente atónitos no es ni de lejos uno de sus objetivos.

Sí que destacará desde el punto de vista artístico, un factor crucial para hacernos sentir realmente en la piel de Max. Pero como ya hemos dicho su espina dorsal será un esquema de decisiones, acciones y reacciones que suena bastante prometedor, aunque por supuesto todavía es pronto para poder afirmar si conseguirá o no romper moldes.

Sinceramente, a veces nos contentamos con que juegos como este lleguen a ofrecer una propuesta sólida, divertida y con un toque especial. Que ya acaben por recibir el reconocimiento de crítica y público que se merecen, tampoco estaría de más.