Call of Duty: Black Ops 3 firma el estreno más potente del año
Call of Duty: Black Ops 3 lleva ya casi una semanita entre nosotros, suficiente para estar hasta en la sopa de nuestra abuela, algo lógico si tenemos en cuenta que los consumidores no parecemos cansarnos del bombardeo anual al que nos tienen acostumbrados desde su editora, Activision.
Porque por mucho que se diga que todos los Call of Duty vienen a ser iguales desde el sensacional Modern Warfare de 2007, por mucho que se diga que cada nueva entrega va destinada tan sólo a los ‘niños rata’ y por mucho que haya ciertos jugadores que no se atreven a decir en público que son fieles seguidores de la franquicia, lo cierto es que cada nuevo lanzamiento acaba pulverizando algún que otro record a nivel comercial.
Black Ops 3 no iba a ser una excepción, más aún cuando se trata del retorno a la primera línea de una de las subsagas más queridas por los jugadores. Con esta contundencia lo demuestran los números: 550 millones de dólares recaudados en todo el mundo en apenas tres días hacen de Call of Duty: Black Ops 3 el estreno de entretenimiento más importante del año, superando ampliamente a la película Jurassic World; aunque habrá que ver qué pasa cuando Star Wars: Episodio VII - El despertar de la Fuerza aterrice en los cines el próximo 18 de diciembre.
En palabras de Bobby Kotick, jefazo de Activision, “los millones de fans de Call of Duty nos han demostrado una vez más su fuerte compromiso con esta sólida franquicia. El lanzamiento de CoD: Black Ops 3 es el más grande del año en cualquier medio”.
Por si fuera poco el grueso de jugadores lleva ya invertido más de 75 millones de horas en su modo online, siendo el título más visualizado en Twitch. En cuanto a las ventas digitales se ha batido el record de CoD: Advanced Warfare, la entrega del pasado año, llegando a arrasar en el caso concreto de PS4, donde Black Ops 3 se ha convertido en el título más comprado durante su lanzamiento en la historia de la consola de Sony.
En definitiva, son unos números como para echarse a temblar, con los que Activision puede justificar sobradamente el seguir desarrollando un Call of Duty al año hasta el fin de los tiempos.