Los problemas de los desarrolladores para lograr que sus juegos alcancen la alta resolución 1080p en Xbox One parecen que no van a terminar con DirectX 12 según afirma uno de los desarrolladores del ambicioso The Witcher 3: Wild Hunt, Balazs Torok, quien declaró en una entrevista a GamingBolt que dicha actualización de la API de Microsoft no hará más sencillo lograr la alta resolución:
“La mayoría de los juegos por ahí no pueden ir a 1080p porque la carga adicional en las unidades de sombrado sería demasiado. Para todos estos juegos DirectX 12 no va a cambiar nada”.
Declaraciones como esta suponen todo un jarro de agua fría para una Microsoft que busca exprimir al máximo las capacidades técnicas de Xbox One liberando a la consola de elementos como Kinect y ofreciendo apoyo extra gracias a la potencia de su nube, todo a fin de que sus juegos no desluzcan al lado de los de su gran rival, una PS4 que no parece tener tantos problemas a la hora de alcanzar la alta resolución.