Inma Cuesta prepara “una historia que le ronda” para convertirla en guión de cine
Poco podía imaginar Inma Cuesta (Valencia, 1980), que el comienzo de su carrera como actriz en la televisión y en el cine iba a desembocar en un período intensísimo de trabajo. “En once años no he parado, no he tenido ni un mes de descanso. Ahora es la primera vez que me estoy tomando un tiempo para mí, tomando perspectiva de todo”, dice Cuesta, y lo dice durante la promoción en Málaga de la película Capitán Koblic. Es decir, lo dice trabajando. ¿Y no tiene la sensación, a pesar del intenso trabajo, de que desde la película 'Primos' ha elegido pocos papeles? “No, yo tengo la sensación de que no he parado de trabajar, he estado estrenando tres películas al año. Y he elegido mucho desde el principio, aunque ahora llevo un tiempo sin elegir nada más, desde 'La novia', 'Julieta' y esta película. Es que quiero estar tranquila y elegir lo que me apetece contar. Si no, me buscaré la vida para contarlo yo”.
Tiramos del hilo de esta última afirmación. ¿Acaso quiere dirigir? ¿Cómo quiere contar esa historia? “Eso de que tengo una historia significa que escribo, y que en algún momento me gustaría... quizá no dirigir, pero sí contar la historia que yo necesito contar. Hay una historia que me ronda, pero a ver si tengo la disciplina de sacarlo adelante. La historia que tengo en la cabeza no tiene mucho humor, pero siempre habría que buscarlo. A mí me sale la tragicomedia, yo soy muy payasa, tengo mucho sentido del humor”. De momento, antes de que legue ese proyecto, Cuesta tiene Capitán Koblic en cartel. Una cinta en la que interpreta a una argentina del interior con un acento irreprochable. “Siempre he sido aficionada a imitar acentos y personas, desde pequeña. Me llamó el director de la película y me dijo que hacía de argentina del interior... Me escogió porque había escuchado una entrevista de radio en la que yo hacía de argentina. Fue lo primero que le salió cuando buscó mi nombre en Google”.