El terrorismo sigue sembrando el terror en Pakistán. Un nuevo atentado suicida en la ciudad de Peshawar, capital de la Provincia de la Frontera Noroeste (NWFP) ha causado la muerte de al menos 16 personas y ha herido a otras 25.
El ataque se produjo en torno a las 10.30 hora local (5.30 GMT) en las inmediaciones de un complejo judicial, una zona dotada de grandes medidas de seguridad de la carretera de Khyber, situada en una céntrica avenida de Peshawar.
“El terrorista suicida se acercó por su propio pie al complejo y se inmoló cuando los guardas de seguridad le impidieron su entrada”
, ha confirmado el jefe de la administración de la ciudad, Sahibzada Anis, quien ha señalado que entre los muertos había tres policías.
El complejo judicial se encuentra cerca del principal hotel de Peshawar, donde se perpetró otro atentado el pasado mes de junio. Además, un guarda de seguridad de un edificio cercano fue asaltado la semana pasada.
La ciudad, cerca de la frontera con Afganistán, ha sido el blanco de muchos ataques desde que el Ejército paquistaní inició la ofensiva contra los milicianos talibán en la provincia de Waziristán del Sur.
En concreto, más de una veintena de personas han muerto en dos de los últimos atentados, uno contra la principal agencia de Inteligencia paquistaní en un barrio militar de Peshawar y otro en un ataque suicida con coche bomba, lo que ha provocado el caos entre los habitantes de la ciudad, preocupados por su seguridad.