El general David Petraeus, comandante de las tropas de Estados Unidos y la OTAN en Afganistán, ha conseguido que se apruebe la ampliación del contingente internacional en la zona. Así, unos 2.000 soldados más serán desplazados en las próximas semanas junto con unos 750 expertos en entrenamiento para reforzar las tropas afganas, según ha informado CNN.
El número de militares estadounidenses no está concretado, pero comprenderá la mayor parte del conjunto, aunque los aliados europeos deberán concretar sus aportaciones.
Esta petición ha sido planteada a la OTAN a puerta cerrada y consistía en una ampliación de, además de los 2.000 militares más, unos 750 expertos en entrenamiento para reforzar las tropas afganas.
En este sentido, hay que señalar que Petraeus no ha pedido públicamente más efectivos, de hecho, los detalles han sido confirmados a la cadena de noticias por parte de un responsable del Departamento de Defensa estadounidense y un cargo de la OTAN.
Por otro lado, los especialistas en cualificación deberán entrenar a las unidades afganas que realizarán funciones de apoyo, pero sobre todo, para contrarrestar la gran amenaza que todavía suponen los artefactos explosivos improvisados (IED).
Estos efectivos de refuerzo, según ha informado un mando de la OTAN, serán con toda probabilidad, estadounidenses ya que en la práctica, sólo Estados Unidos cuenta con la equipación más avanzada para el combate de dichas bombas. Así, ha declarado que “es una consecuencia de la dirección que está adoptando la campaña: instrucción de las fuerzas de seguridad afganas para preparar la transición y proteger a nuestras fuerzas”.
No obstante, aún no se ha tomado ninguna decisión definitiva ya que las autoridades militares de la OTAN deben reunirse para decidir las aportaciones de cada país. Lo que si es seguro, según afirmó la fuente de la OTAN, es que la mayoría de nuevos refuerzos sean también de Estados Unidos, ya que suponen una cantidad relativamente pequeña, menos de un 2% de los 150.000 militares que actualmente están desplegados en Afganistán.
500 militares extranjeros muertos en lo que va de año
Este anuncio de refuerzo de tropas en Afganistán coincide con el recuento que ha efectuado la agencia Reuters del número de militares extranjeros muertos en Afganistán en el 2010. En este sentido, la cifra se eleva hasta los 500 soldados y alarma en comparación con el año pasado, ya que en todo 2009 fueron 521 los efectivos fallecidos.
Así, con la ampliación de la resistencia talibán en el sur y este de Afganistán y la intensificación de los combates con los insurgentes, la agencia destaca que se ha producido un rápido aumento de los efectivos extranjeros muertos, la mayoría estadounidenses.
En este sentido, el pasado mes de junio fue el peor desde que comenzó la guerra a finales de 2001, ya que el número de fallecidos llegó a 102, en julio 88 y en agosto 80, según la página Web www.iCasualties.org.
Desde que comenzó el conflicto han fallecido 2.068 soldados extranjeros, de los que el 60% eran estadounidenses. De esta cifra, casi la mitad de las muertes se produjeron en 2009 y 2010.
Esta situación ha contribuido a que la población de los países que tienen tropas desplegadas en la zona reduzca el apoyo a la guerra. Pero con todo, la peor parte la lleva la población afgana. El pasado mes de agosto Naciones Unidas (ONU) publicó un informe que muestra el aumento de víctimas civiles en el primer semestre de 2010 con respecto al mismo período de 2009, que se incrementa en un 31%, siendo la mayoría de ellas causadas por insurgentes.