4 centros riojanos tendrán que dar religión islámica en febrero...y hay 9 peticiones más

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En cuatro centros de Logroño, dos de Primaria y dos de Secundaria, se tendrá que ofrecer la religión islámica como asignatura para, como máximo, finales de febrero. Y es que ese es el plazo par ejecutar las sentencias del Tribunal Superior de Justicia de La Rioja que dan la razón a dos madres que acudieron a los tribunales porque creían que se estaban vulnerando los derechos de sus hijos.

La primera sentencia favorable fue la de Marian Aretio, que recurrió a la vía judicial para reclamar que Educación, tal y como marca la Ley, oferte esta asignatura en los centros en los que haya un número mínimo de 10 alumnos que lo soliciten. En La Rioja hay, según sus cálculos, 37 colegios que superan este porcentaje. A su denuncia siguió la de otra madre, que también obtuvo al poco tiempo una sentencia favorable.

Eso fue en noviembre y se abría entonces un plazo para que la sentencia fuera firme, lo que Aretio cree que pasará la semana que viene. A partir de ahí, el Gobierno de La Rioja está obligado a poner en marcha esta asignatura en un plazo máximo de 2 meses. Es decir, a finales de febrero, ya se deberá ofrecer religión islámica en los centros de los dos hijos de Aretio y de los tres de la otra madre -uno de ellos es el mismo que el de un hijo de Aretio-, todos ellos en Logroño. Si el Gobierno no lo hace, interpondrán un recurso de ejecución.

La Rioja, la primera comunidad en ofrecer religión islámica también en Secundaria

A estos centros podrían sumarse próximamente más, ya que se han interpuesto cuatro demandas procedentes de Calahorra, tres de Haro y dos de Santo Domingo de la Calzada, para las que presumiblemente, la sentencia también será favorable.

Ante la probable avalancha de demandas en los juzgados, Aretio considera que “lo lógico sería que el Gobierno de La Rioja aplicara esta medida donde haya 10 alumnos que lo soliciten” y no sólo en los de las sentencias ganadas. No tiene sentido que ahora saturemos el Tribunal Superior de Justicia. Esto es un toque de atención para el Gobierno”

Prueba piloto el próximo curso

El Ejecutivo ya manifestó su intención de ofrecer religión islámica el próximo curso a nivel experimental y como prueba piloto, pero Aretio advierte de que no es suficiente: “No nos vamos a conformar con eso. Entendemos que la Consejería tiene que cumplir la Ley ya. No se puede permitir que una Administración esté vulnerando derechos”. Y es que ese derecho está reconocido para este curso, con lo que su aplicación “ya lleva retraso”.

Cómo se impartiría

La Comunidad musulmana estima que hay unos 3.000 alumnos musulmanes en Primaria en La Rioja y cree que se podría contratar a un profesor a jornada completa para impartir la asignatura ya. Han presentado a la Consejería un listado con 27 docentes preparados para ello. También existe material didáctico, con libros que recogen los principios de la religión islámica y también otros valores relacionados con la educación cívica y el rechazo a la violencia terrorista, entre otros.

Si hay suficientes alumnos, se intentaría agruparlos por ciclo o incluso por centro, como ya se hace con la religión católica en los Colegios Rurales Agrupados, donde no hay suficientes niños por curso y los alumnos estudian la asignatura mezclados con otros de distintas edades.

Además, Aretio reclama que, al principio de curso, se les permita a los padres la posibilidad de elegir religión islámica de forma oficial, ya que, hasta ahora, sólo podían escoger entre religión católica y valores.

También en los concertados

Además, esta semana representantes de la comunidad musulmana en La Rioja tienen previsto reunirse con la Diócesis para estudiar la posibilidad de ofertar religión islámica en los centros concertados. La Ley dice que todos los centros que reciban financiación pública tienen que permitir que se imparta esta asignatura, descata Aretio.

Ante el debate de que los padres musulmanes pueden elegir otro centro que no sea católico para sus hijos, Aretio reivindica que en La Rioja esto no siempre es posible, sobre todo en pueblos en los que hay más colegios concertados que públicos y no siempre hay plazas en estos últimos.

De momento, las dos sentencias favorables son para centros públicos, pero todo parece indicar que son las primeras de muchas y que esto es un proceso imparable.