@page { size: 21cm 29.7cm; margin: 2cm } P { margin-bottom: 0.21cm } Juan de Dios Ramírez Heredia, primer diputado nacional y europeo gitano, presentará hoy a las 18 horas en el Centro Cultural Caja Rioja-La Merced el documental '21 días en una chabola' y hablará del movimiento gitano en España, que se cuantifica en unas 700.000 personas, y en el mundo.
Hay varios puntos que ha querido destacar como que los gitanos no avanzan al mismo ritmo que los payos en la sociedad y que las culturas que no evolucionan están condenadas a desaparecer. Sin embargo, tal y como ha explicado, “es un milagro que exista un pueblo de más de 14 de millones de personas de cultura ágrafa, que jamás escribió una línea”.
Asegura que los 'gitanos modernos' no se oponen al cambio pero que las reglas las tienen que dictar ellos. “El cambio es producto del esfuerzo, el trabajo y la inteligencia para luchar contra la lacra del analfabetismo, el paro y la marginación y así ocupar el puesto que nos corresponde en la sociedad. ¿Por qué no puede ser un gitano presidente del Gobierno? A algunos racistas de este país no les gusta que la Constitución lleve mi firma, que se fastidien”.
El presidente nacional de la Asociación Romaní considera que la máxima prioridad para alcanzar la igualdad es la presencia masiva de los niños gitanos en la escuela. “La educación nos hace libres y nos da las armas para luchas. No se les puede echar la culpa a los payos de todo”.
Por su parte, Enrique Jimenez, presidente de la Asociación de Promoción Gitana de la Rioja, ha señalado que en La Rioja no ocurre eso gracias al esfuerzo y trabajo continuo pero que lo que falta es que los gitanos lleguen a la universidad. “El gran problema del gitano en La Rioja es la vivienda. Cuando vi el documental que se va a proyectar esta tarde pensé que qué suerte, ya que eso se ve y las autoridades políticas pueden mejorarlo. En Logroño existe un chabolismo oculto y los políticos, tanto Ayuntamiento de Logroño como Gobierno de La Rioja, no hacen nada. La política de rehabilitación del Casco Antiguo sólo se encarga de arreglar las fachadas y las farolas. Por dentro hay problemas eléctricos, de ventilación, casas con grietas y prácticamente en ruinas”, señala.
Juan de Dios también ha querido hablar de la evolución de esta etnia. “Durante el franquismo la lucha era más fácil y más peligrosa que ahora. Más fácil porque el racista estaba identificado, era el Gobernador Civil, el alcalde, etc. y más peligrosa porque te metían en la cárcel. Hoy en día no es peligroso porque existe la libertad de expresión pero el racista no tiene nombre ni apellidos. Es una masa que no quiere que los gitanos vayan a un colegio o que vivan en un barrio”.
Este abogado, periodista y Doctor Honoris Causa por la Universidad de Cádiz cree que los gitanos tienen mucho que aportar a esta sociedad mayoritaria de payos: “El respeto de los hijos a los padres y a la sabiduría de los ancianos, el no vivir para trabajar sino trabajar para vivir dignamente sin tener que comprar cosas innecesarias y una mijita de alegría en un mundo triste y serio con nuestro folclore, nuestro cante y nuestro baile”.
También cree que hay cosas que los gitanos tienen que aprender de los payos, como la capacidad de previsión y la capacidad de hacer, casas, bancos y ordenadores, es decir, evolucionar en el mundo moderno y la tecnología. De hecho, Juan de Dios se ha quedado absolutamente prendado de las pequeñas grabadoras de los periodistas y al finalizar la rueda de prensa, les ha estado preguntando sus características y precio. “Me voy a comprar una”, ha sentenciado.