La organización pro derechos humanos Amnistía Internacional (AI) ha hecho hoy público su informe España: La formación en derechos humanos de las fuerzas de seguridad sigue siendo marginal, una actualización del análisis realizado por la organización sobre esta materia en 2001 y cuyos resultados asegura que son “preocupantes”.
Tras su estudio, AI saca unas conclusiones generales sobre la formación que tanto policías como guardias civiles reciben en materia de derechos humanos por parte del Ministerio del Interior.
Así, señalan que la evolución de la enseñanza en derechos humanos que se imparte tanto en la Policía Nacional como especialmente en la Guardia Civil “arroja resultados decepcionantes”, ya que la carga lectiva sobre derechos humanos es “alarmantemente escasa”. En la Policía Nacional se encuentra entre el 2 y el 3,4% de la carga lectiva total de su formación. Y en la Guardia Civil, entre el 2,7 y el 4,5%.
Según la organización, España debería seguir las normas internacionales que recuerdan que “la formación que reciben las fuerzas de seguridad refleja la clase de policía que un país se propone tener; cuanto más presentes estén en ella los derechos humanos, más eficaces, respetadas y ajustadas a su misión serán estas instituciones”.
“La formación que reciben los agentes de Policía Nacional y los miembros de la Guardia Civil, especialmente durante su ingreso al cuerpo, es claramente insuficiente, con una carga lectiva residual que prácticamente invisibiliza los derechos humanos, cuando estos deben enseñarse como parte intrínseca del papel y las funciones de las fuerzas de seguridad, no como algo suplementario y opcional. Deben formar parte de toda la formación inicial de los nuevos agentes, pero también de la formación que reciben a lo largo de su vida profesional”, asegura Esteban Beltrán, director de Amnistía Internacional en España.
Además, AI afirma que los aspirantes a Policía Nacional y Guardia Civil, y los propios profesionales, no reciben una visión general ni una actualización sobre la situación de los derechos humanos en España, ni se les proporciona información sobre las recomendaciones de obligatorio cumplimiento al Estado español por parte de organismos internacionales (como el Comité contra la Tortura o el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer).
“No existe ningún procedimiento que permita detectar a alumnos o alumnas con valores o actitudes contrarias a los derechos humanos y que deberían imposibilitarles para llevar a cabo su labor. La formación que reciben no hace referencia a la situación actual de los derechos humanos, ni al contexto de acogida de inmigración, ni al aumento de la diversidad cultural en la sociedad española ni al problema de discriminación que desde hace décadas sufren las personas de etnia gitana” aseguran desde la organización que pide al Ministerio de Interior la incorporación de una mayor carga lectiva de la enseñanza específica de derechos humanos en la formación de ingreso a ambas instituciones.