Tras conocer la propuesta de la alcaldesa Cuca Gamarra para la construcción del edificio de la nueva estación de autobuses, el candidato regionalista al Ayuntamiento de Logroño ha realizado una propuesta que supondría un importante ahorro, ofreciendo los mismos servicios. Rubén Antoñanzas entiende que es necesaria la nueva estación ya que la actual ya no responde a las necesidades de la ciudad pero no cree que deba construirse un nuevo edificio con otras dos cafeterías, más zonas de espera, taquillas, servicios y zona de venta de billetes.
“Justo enfrente tenemos la estación de tren que está totalmetne infrautilizada y tiene espacio de sobra para ubicar una estación intermodal”, ha explicado. En su proyecto, previsto en la misma ubicación, se plantea una dársena abierta con 28 plazas para autobuses y otras 12 de reserva por si se van ampliando las necesidades.
Con este planteamiento, “los ciudadanos esperarían en la actual estación de ferrocarril, aprovechando todo el espacio que ahora está prácticamente vacío, utilizando la misma sala de espera, cafetería y servicios, y unos minutos antes de salir su autobús, irían bajo una pérgola cubierta hacia la zona de dársenas”.
Según los datos planteados por el candidato regionalista, la obra tendría un coste de unos 750.000 euros, muy por debajo de los 21 millones de euros que se plantean con la construcción de una nueva estación. Otra gran ventaja sería la inmediatez del proyecto ya que podría estar listo en apenas 5 meses.
Considera Antoñanzas que no es el momento de grandes proyectos innecesarios sino de optimizar al máximo los recursos dando al ciudadano el servicio que necesita. En su opinión, los 20 millones de euros que se ahorrarían con su propuesta podrían destinarse a seguir adelante con las obras del soterramiento o a cubrir otras necesidades que tiene la ciudad.
Otra de las ventajas se refiere al mantenimiento. La propuesta del Ayuntamiento es una estación cerrada que requiere ventilación especial para los gases que emiten los autobuses con un permanente mantenimiento de esas instalaciones. Con el sistema de dársenas abiertas se acabaría también con ese problema.
Ha recordado también que, cuando el Partido Riojano apoyó hace unos años la construcción del nuevo edificio para la estación de autobuses, el planteamiento era bien distinto. “Se preveía en ese momento la llegada del AVE y una frecuencia altísima de trenes pero la realidad, años después, es la contraria, tenemos una gran estación pero está completamente vacía”. La situación económica tampoco es la misma y por eso, “ante nuevas realidades, creemos que hay que aportar nuevas ideas e iniciativas, hay que estar con los ciudadanos y darles un buen servicio, la única diferencia son los 20 millones de euros que se ahorran”.