El presidente del Gobierno de La Rioja, Gonzalo Capellán, ha participado este miércoles en la reunión periódica que mantiene la consejera de Agricultura, Ganadería, Mundo Rural y Medio Ambiente, Noemí Manzanos, con representantes de las organizaciones profesionales agrarias (ARAG-ASAJA, UAGR y UPA) para abordar la situación del sector vitivinícola.
ARAG-ASAJA ha presentado una serie de medidas “para garantizar la supervivencia del sector vitícola riojano”, han dicho. En concreto, han pedido que el Gobierno de La Rioja inste al Ministerio de Agricultura a apoyar y solicitar a la Comisión Europea la puesta en marcha de la medida de arranque definitivo de viñedo. “Esto ya ha ocurrido en otros países como Francia, cuyo gobierno ha destinado una importante partida económica para ello. En España, sin embargo, vemos como el ministro Luis Planas parece ajeno a las dificultades que está atravesando el sector vitivinícola español”, ha señalado el presidente de ARAG-ASAJA, Eduardo Pérez.
“En este sentido, todo el sector y las instituciones debemos estar unidos”, ha aseverado Pérez, “los viticultores llevan cinco campañas muy complicadas en las que han visto cómo su rentabilidad caía más del 35% mientras subían los costes casi un 20% y bajaban en un 15% lo que recibían por sus cosechas”, y ha continuado “agradecemos el esfuerzo que administraciones como el Gobierno de La Rioja han realizado en estas últimas campañas con medidas para reducir los excedentes. Pero se trata de medidas coyunturales y necesitamos dar un paso más con decisiones eficaces para superar la crisis estructural que atraviesa el sector del vino. Un sector que, por otra parte, ha colaborado en el desarrollo económico y social de esta región, La Rioja”.
Además, de esta cuestión, ARAG-ASAJA también propone constituir cuanto antes y en el seno de la Consejería de Agricultura, una mesa de trabajo para la gestión potencial vitivinícola con la participación de las entidades representantes del sector productor para analizar, debatir y acordar los criterios para acceder a la medida de arranque, así como de los criterios de admisión y prioridad de la medida de reestructuración y reconversión de viñedo para no agravar la actual situación excedentaria. Por otra parte, la organización agraria plantea la puesta en marcha el Registro de Empresas Responsables con medidas incentivadoras para las que deseen incorporarse de forma voluntaria a este registro y cumplir con los protocolos o códigos de buenas prácticas que deban asumirse para poder figurar en él.
Otra de las propuestas que ARAG-ASAJA considera importantes es que el Ministerio de Agricultura se involucre más y apueste por incorporar las mejoras en la Ley de la Cadena Alimentaria. “La cuestión de la promoción y el fomento del conocimiento de la cultura y el consumo responsable de vino, mediante el apoyo a campañas como la de Vitaevino, tiene que verse respaldadas por las instituciones”, han defendido.
En lo referente a las operadoras, ARAG-ASAJA apuesta por mejorar las relaciones contractuales entre viticultores y bodegas con, por ejemplo, códigos de buenas prácticas y continuar con la implementación de una mejora en los sistemas y procesos del control cualitativo y cualitativo de uva y de vino de Rioja. En este sentido, la organización propone invitar a las administraciones competentes, Ministerio, Comunidades Autónomas a las reuniones que mantengan en el seno de la OIPVR para analizar la situación del sector y la puesta en marcha de medidas para la mejora del mismo.