Argentina y Rusia están a un paso de las semifinales de la Copa Davis tras la disputa de la segunda jornada de los cuartos de final del 'torneo de la Ensaladera' después de que Nalbandián y Coria por un lado; y Davydenko y Andreev, por el otro, ganaran sus respectivos encuentros de dobles. Con dos puntos también se encuentra Estados Unidos gracias a las victorias en los individuales de Andy Roddick y James Blake sobre Michael Llodra y Paul Henry Mathieu, respectivamente. Sin embargo, el conjunto de las barras y estrellas se quedó sin poder sellar el 3-0 definitivo ante Francia cuando lo tenían todo a favor.
Los gemelos Brian fallaron ante el tándem galo, Clement y Llodra por 7-6 (7), 5-7, 3-6 y 4-6, y, aunque continúan por delante en la eliminatoria (2-1), deberá ser en individuales cuando cierren una victoria que les colocaría ante España en las semifinales. Por su parte, los rusos, tras el empate en la jornada inicial, hicieron del doble su segundo punto ante la República Checa. La dupla rusa formada por Nikolay Davydenko, flamante campeón del Masters de Miami, junto con Igor Andreev, se impusieron a la centroeuropea en casi tres horas de partido y por un 3-6, 6-3, 7-5 y 6-4.
Davydenko y Andreev, que demostraron un alto nivel, sobre todo a partir del set inicial, donde cedieron por problemas en su servicio, adelantaron a Rusia en la eliminatoria y los chechos, por su parte, deberán despertar de la mano de su número uno, Tomas Berdych, si no quieren despedir en el primer choque de la jornada dominical. Si los rusos confirman su clasificación para las semifinales de la Davis se verán las caras con Argentina, que también tomó ventaja gracias al doble compuesto por David Nalbandián, santo y seña de la albiceleste, y Guillermo Cañas, que ganaron a la pareja sueca Jonas Bjorkman y Robert Linstedt por 7-5, 6-4 y 6-4.
Después de un comienzo dubitativo de los sudamericanos, que erraron en los dos primeros servicios dando así ventaja a los suecos, Nalbandián y Cañas llevaron el set a su extremo para sumar el primero de un partido que acabó siendo más sencillo de lo previsto. En la segunda manga, Argentina tardó en romper el servicio sueco al hacerlo en el noveno juego. Linstedt perdió la eficacia que había demostrado hasta el momento y la albiceleste puso la directa a la victoria, que culminó y cerró en el tercer acto, repitiendo el 6-4.