La delegada del Gobierno en La Rioja, Beatriz Arraiz Nalda, y la jefa provincial de Tráfico, Beatriz Zúñiga Reinares, han presentado esta mañana las medidas incluidas en el plan de choque de siniestralidad vial en La Rioja para 2024. El Ministerio del Interior presentó a finales de abril este plan para toda España, que se ha concretado en las comunidades autónomas, ante el aumento de la siniestralidad en el primer trimestre del año.
Arraiz Nalda ha insistido en que “no podemos permanecer impasibles ante la siniestralidad vial y es imperativo promover medidas para reducir la mortalidad vial”. Por ello, el Plan se ha elaborado como respuesta inmediata a la evolución de la siniestralidad en el primer trimestre de 2024 en nuestro país, con un aumento del número de fallecidos en las carreteras españolas del 16 por ciento al pasar de 225 personas fallecidas en vías interurbanas e 2023 a 261 en 2024.
Aunque La Rioja en este primer periodo fue una de las comunidades autónomas en las que se redujo el número de fallecidos en las carreteras interurbanas, pasando de cinco a dos, esta última semana hemos tenido que lamentar tres fallecidos. Por ello, “todas las medidas para reducir la siniestralidad vial son siempre necesarias”, ha subrayado la delegada.
Con respecto al Plan de choque para 2024 y con una implantación de carácter inmediato, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil ha propuesto para La Rioja una serie de medidas propias que pretenden reducir el número de siniestros de tráfico y su letalidad en nuestra comunidad autónoma. Las mismas se centran en el aumento de efectivos, el incremento de la vigilancia en las carreteras, intensificando los controles de velocidad y del consumo de alcohol y drogas. Asimismo, se ha previsto la realización de dispositivos operativos específicos para la prevención de la siniestralidad de motocicletas en vías interurbanas, así como la intensificación del control de vehículos profesionales.
Otro aspecto en el que se actuará es la visibilidad de la Guardia Civil en la carretera como medida de disuasión y prevención. Por su parte, la jefa provincial de Tráfico ha concretado que este año han fallecido un total de ocho personas en las carreteras riojanas, cinco en ámbito interurbano y tres en urbano, dos de estas últimas víctimas mortales son vulnerables al ser un peatón y un motorista. En cuanto a las vías interurbanas, competencia de la Guardia Civil, dos personas han perdido la vida en la N-232, uno en la AP-68, uno en carretera autonómica y uno en un camino.
Todos los accidentes mortales se han producido por distracción, velocidad y uno de los fallecidos no llevaba cinturón de seguridad. Además, el alcohol o las drogas ha sido un factor concurrente en un 10% de los siniestros mortales. A pesar de que el número de fallecidos en ámbito interurbano es inferior que el año pasado a estas fechas, cinco frente a siete víctimas mortales, Zúñiga Reinares ha explicado que“ el factor humano es decisivo y es necesario el trabajo continuo para seguir trabajando en la concienciación social sobre la gravedad de los accidentes viales”.