Está hecho un chaval y este domingo quiere volver a domostrarlo en el Ogueta de Vitoria. Es Augusto Ibáñez, Titñi III, el delantero riojano de Aspe que a sus 39 primaveras quiere demostrar en la final del Campeonato de Parejas que está como en sus mejores tiempos. Junto a Laskurain buscará su segunda 'txapela' de la temporada después de su rotundo éxito en el Cuatro y Medio.
La final será, como todas, complicada, pero a los puntos (aunque no vale para nada) el riojano ya gana después de que en los tres enfrentamientos en el campeonato se haya llevado el triunfo en dos de ellos (11-22 en el estreno en San Sebastián y 12-22 en el último partido de semifinales). Para el riojano será su quinta final en el Parejas, todo un aval que asegura, cuando menos, que los nervios no pasarán factura a Titín. Más aún cuando el delantero de Aspe es consciente de que gran parte de la final se decidirá en los cuadros traseros. Para el de Tricio el zaguero que menos fallos cometa más facilitará a sus delantero y condicionará el desarrollo del partido. Y zaguero tiene. Laskurain ha completado un buen campeonato con fallos puntuales, pero sabiendo estar en los momentos más comprometidos. Su solvencia, sus buenas manos y su regularidad animan a Titín para seguir soñando con el doblete.
“Basta que se diga que fallarán ellos para que la pifiemos los delanteros. Se está hablando mucho de Laskurain y Mendizabal. Que si los nervios, la presión... Pero están en la final porque se lo han ganado y han demostrado que son dos grandes zagueros. Yo juego muy confiado con Laskurain”, señaló en la elección Titín que no quiso pronunciarse sobre cómo será la final: “Nosotros hemos preparado el partido muy bien, pero en la final influyen muchos factores. Puede pasar de todo y cualquiera puede fallar”.
Su contraparte, Olaizola II, sabe que Titín puede revolucionar en cualquier momento el partido aunque avisa que también habrá que prestar atención a su zaguero, Laskurian: “Titín empieza y termina muy bien. Ya sabemos todos lo que juega. Pero no sólo Titín, también Laskurain. Siempre se suele hablar de un sólo pelotari de la pareja, pero lo más importante aquí es que jueguen bien los dos miembros de la pareja. Es verdad que Titín sale muy fuerte al principio y es difícil sujetarle, pero creo que primero habrá que ver cuál de los dos zagueros sale dominando. Está claro que, si Titín coge pelota adelante, rematará. Pero eso pasa con todos. Por eso, habrá que intentar que no remate y, cuando lo haga, defender adelante lo mejor que se pueda.
En el transcurso de la ceremonia protocolaria de elección del material, llevada a cabo hace dos días en el mismo escenario de la gran final, la pareja de la empresa 'Asegarce', formada por el navarro Aimar Olaizola (Olaizola II) y el guipuzcoano Oier Mendizabal, separó tres pelotas que arrojaron unos pesos de 104,2, 103 y 104,6 gramos. Los pelotaris representantes de la empresa 'Aspe', el delantero riojano Augusto Ibáñez Sacristán (Titín III) y el joven zaguero guipuzcoano Aritz Laskurain, se quedaron con tres 'bolas' algo más pesadas, que dieron unos pesos en la romana de 105, 105,4 y 106,5 gramos, respectivamente.
Todo listo, pues, para que Titín vuelva a tirar de su particular elixir de la eterna juventud y acumule una txapela más a su ya repleta colección.