La petrolera británica BP ha informado de que está preparada para reanudar las operaciones destinadas a frenar el vertido de crudo en el golfo de México, después de superar el percance sufrido horas antes y que había obligado a detener los trabajos.
BP se vio obligada a suspender su nuevo intento para frenar la fuga -que consiste en cortar partes del conducto afectado para que una cúpula recoja el vertido y lo canalice hacia un contenedor en la superficie-, después de que una de las sierras utilizadas para ello se quedara atascada en la tubería por la que mana el petróleo.
Finalmente, los operarios de la compañía consiguieron retirar la herramienta y los trabajos se reanudarán en las próximas horas, informó la petrolera británica.
La causa de este peligroso proceso de vertido de crudo al mar, que ya ha afectado de forma preocupante a la zona, es la explosión ocurrida el pasado 22 de abril en la que murieron once trabajadores de la plataforma petrolera hundida.