El Ministerio de Hacienda y los representantes de los empleados públicos (CSIF, UGT y CC OO) firmarán este miércoles el pacto con el alza del 1% de sueldo para los funcionarios y el plan para una macroconvocatoria de oposiciones de más de 250.000 plazas en tres años. En este histórico plan también están involucradas comunidades autónomas y Ayuntamientos.
El objetivo consiste en reducir la tasa de temporalidad, del 20% en el sector, y permitir la conversión de trabajadores interinos en fijos. Esta condición de empleados temporales se valorará a la hora de lograr las plazas, aunque también se podrán presentar personas externas. Así, además, se podrá cumplir con la sentencia del Tribunal de la Unión Europea (TJUE) que igualaba las condiciones de despido de los trabajadores interinos y fijos.
“El objetivo consiste en reducir la temporalidad un 90% en tres años”, explican desde CSIF, el sindicato mayoritario de la Administración General del Estado. Con este plan todas la plazas que lleven más de tres años ocupadas por trabajadores temporales saldrán a concurso. La idea es que se tenga en cuenta y se valore en la oposición el tiempo que un trabajador ha estado al servicio de una administración pública.
Para Sanidad se espera que se convoquen 129.700 plazas en los próximos tres años, otras 98.807 puestos fijos en educación y 8.654 plazas para justicia. También están previstas convocatorias para servicios sociales y en otros sectores públicos. El coste inicial de esta convocatoria será reducido porque consistirá básicamente en sustituir el sueldo de los interinos por el de fijos.
Desde CSIF celebran la convocatoria “histórica” pero rechazan la subida del 1% a los funcionarios que se prevé aprobar “sin margen de negociación”. Desde el sindicato presidido por Miguel Borra reclaman un plan plurianual para recuperar, al menos, el 5% de la bajada que sufrieron los funcionarios en 2010.
UGT también considera el acuerdo como “histórico” porque podrá reducirse la precariedad del empleo público. De este sindicato calculan que las plazas que saldrán a oposición ascienden a 350.000 porque suman a las 250.000 puestos que saldrán a concurso para convertir interinos en fijos otros 100.000 por los funcionarios que se jubilen en los próximos tres años, aunque ese cálculo es orientativo. El acuerdo “rectifica la política de recursos humanos del gobierno y pone orden a la caótica situación provocada por años de recortes”, señala UGT en un comunicado. Por su parte CC OO reclamaba una subida salarial de, al menos, un 1,2% en línea con la inflación.