Como sabéis, ayer martes por la tarde, se celebró una Asamblea General Extraordinaria en Caja Rioja con un único punto en el orden del día. El mismo era la aprobación del Contrato de Integración para la Constitución de un Grupo Contractual, asentado en un sistema institucional de protección (SIP) entre Caja Rioja y otras seis Cajas de Ahorro.
En primer lugar el Presidente de nuestra entidad destacó las virtudes del SIP en relación con el mantenimiento de la Personalidad Jurídica, los Órganos de Gobierno, la Marca y el Compromiso Territorial. Seguidamente, resaltó la estabilidad que va a suponer esta integración tanto para los clientes como para los empleados de Caja Rioja. Así mismo, señaló que quedará garantizada la sostenibilidad de nuestra Obra Social.
El Director General realizó una exposición sobre el Contrato de Integración. Informó que se realizará un traspaso gradual a la Sociedad Central de la mayor parte de activos y pasivos. Dicha sociedad tendrá ficha bancaria y se encargará de la dirección unitaria del grupo. También se llevará a cabo una progresiva integración de los servicios centrales e informática.
Comentó que la previsión de beneficios en el grupo es de un aumento del 80% para el año 2015 y en Caja Rioja alcanzaremos los 45 millones de euros ese mismo año
. Por otro lado, queda pendiente la elaboración, antes de final de año, de un Plan Estratégico para los años 2010-2014. Nuevamente, hizo referencia a reordenación interna mediante procesos negociados y sin la utilización de medidas traumáticas, preferentemente a través de prejubilaciones.
Posteriormente, se llevo a cabo la votación de la integración en el SIP. Asistieron 90 miembros (de los 100 que componen la Asamblea) y el resultado fue de 88 votos a favor, 2 votos en contra (Partido Riojano) y 0 abstenciones. Los 5 representantes de CC.OO. apoyaron el SIP tras haberse alcanzado recientemente un acuerdo en la Mesa Laboral (ver en la Intranet, CC.OO. 13-9-2010) que recoge todas las exigencias que nuestro sindicato había planteado como condición obligatoria para ratificar nuestro voto favorable en las Asambleas Generales de las 7 Cajas que integran la “fusión fría”.