Hoy se ha iniciado la ofensiva por parte del ejército pakistaní hacia uno de los principales bastiones talibán situado en Waziristán del Sur. El secretario de las regiones tribales pashtún de Pakistán, Tariq Hayat Khan, ha declarado que “la operación terrestre ha comenzado”,sin dar más detalles.
La incursión por tierra culmina hoy varias semanas de bombardeos sobre uno de los reductos talibán más importantes de la frontera junto con Balochistán, hogar de más de 6.000 guerrilleros talibán armados y habitual refugio de la cúpula talibán paquistaní.
Horas antes del inicio de la ofensiva, las autoridades de Pakistán impusieron el toque de queda en toda la provincia fronteriza para proteger a las fuerzas que entren en el bastión miliciano. “El toque de queda es para la protección de las caravanas militares y se aplica a los caminos. Las tiendas están abiertas”, dijo el portavoz del Gobierno, Mohammed Khan.
En la región se encuentran ahora cerca de 28.000 soldados, a los que se suman 500 comandos adicionales que llegaron a la región el pasado viernes, según han declarado funcionarios de seguridad.
Más de 80.000 civiles han huído desde la zona de Waziristán del Sur antes del inicio de la ofensiva y, según la agencia de refugiados de la ONU dijo que más personas abandonaron la zona a lo largo de esta semana.